¿Qué harías si ves a alguien tomando de tu plato la comida que estaba servida para ti? Nadie lo podría tolerar. No soportaríamos si alguien metiera su mano donde no debe. Y al igual que las personas, los animales también son así con su comida.
Observa ahora cómo este gato queda estupefacto al ver cómo una zarigüeya se roba su alimento recién servido por su dueño. En vez de responder con sus garras, el pobre minino simplemente lo observa y pide ayuda.
El gatito solo ve con impotencia cómo el animal salvaje se come su cena, casi que quejándose con su humano como si dijera: “¿Por qué dejas que pase esto?”.
Sin duda, el gato parece que ha perdido sus instintos naturales en relación a proteger su comida. En un momento parece que le implorara a su dueño que haga algo.
Aquí te dejamos la graciosa y tierna secuencia de fotos compartida por el dueño del animal en su cuenta de Imgur.
Muchos comentarios hechos por usuarios de las diversas redes sociales han hecho sentir sus críticas, chistes y hasta la empatía que sienten por el lindo gatito.
“Solo un idiota serviría la comida de su mascota fuera de su casa”, comentó uno de los usuarios criticando las acciones del dueño.
Otro señalaba lo peligroso e imprudente que fue dejar a su gato acercarse a ese animal salvaje quien podría contaminarlo o hacerle daño: “¿No saben lo peligrosas que son las zarigüeyas? Ese pobre gatito tuvo suerte, qué dueño tan irresponsable”.
Otro usuario criticó el que nadie hiciera nada y simplemente ridiculizaran al pobre gatito que seguramente estaba hambriento solo para grabarlo y compartirlo en redes sociales:
“Hombre, suelta ese teléfono salva a tu mascota, ayúdala”.
Varios de los usuarios demostraron su afecto y empatía por lo que estaba atravesando el pobre minino. Uno de ellos comentó:
“Así es justamente como yo me siento cuando veo a mi pequeño hermanito comerse mi postre, pobre gatito”.
Ciertamente, día tras día nos vemos llenos de escenas bastantes peculiares, sin duda este pequeño episodio protagonizado por el gato y la zarigüeya es algo extraño. En definitiva, el ganador de esta contienda fue el animal salvaje, quien después de todo fue el único que pudo cenar. Lo siento mucho minino, para la próxima saca tus garras.
Comenta tu opinión sobre el pobre gato pidiendo ayuda por su comida y comparte la graciosa historia con tus amigos.