Al salir de casa aquella mañana, Chuck Hawley pensó que ese viernes sería un día como cualquier otro. Cuando se trasladaba por la carretera para llegar a su trabajo, se dio cuenta de que había algo en la vía.
Al principio Chuck pensó que se trataba de una caja extraviada que quizás se había caído de un vehículo.
Chuck nunca imaginó que conocería a esta pequeñita en un día cualquiera de trabajo
Todos los autos que circulaban por la vía pasaban por encima de ella sin percatarse de nada, pero cuando Chuck se acercó un poco más, descubrió que se trataba de un gatito.
El conductor se sorprendió de la suerte que había tenido el pequeño de no haber sido arrollado por otro vehículo, pero sabía que no podría resistir por más tiempo en un lugar tan peligroso, así que decidió hacer algo por él.
Chuck se dispuso a ayudar a esta chiquilla sin importar nada
Detuvo su automóvil con prudencia en medio de la carretera y se aproximó despacio al gatito para sacarlo de semejante aprieto.
El hombre temía que el pequeño pudiera salir huyendo, pues era evidente que estaba aterrorizado, por lo que intentó moverse con cautela.
La pequeñita había vivido un momento más que traumático
Cuando estuvo lo suficientemente cerca y en vista de que el gato estaba petrificado, el hombre se inclinó. Chuck estaba a punto de descubrir lo peor: la razón por la cual el gato estaba inmóvil, era porque alguien había pegado sus patitas a la vía.
Chuck no podía creer que pudiera existir alguien capaz de hacer algo así. No dudó más y trató de rescatar al gatito. Con mucho cuidado y paciencia removió sus patitas del asfalto y lo llevó de inmediato a un refugio de animales.
Chuck se encariñó con esta gatita de inmediato
Allí se dedicaron a remover el pegamento que estaba en el pelaje del gato, además de curar algunas heridas que estaban en su cuello.
El gatito sobrevivió al trauma y Chuck, que se había encariñado con el pequeño, no dudó antes de decidirse a adoptarlo.
Gracias a la desagradable experiencia de haber sido pegada a la vía, Chuck y su esposa decidieron bautizar a la gatita como Sticky The Kitty.
Después de todo, la traumática aventura de esta pequeña había resultado bastante afortunada.
Para Chuck y su esposa era una enorme alegría saber que Sticky había comenzado su vida de una forma monstruosa e incierta, pero la suerte de contar con la ayuda de este hombre, le había brindado a esta gatita la felicidad de poder tener una familia, en la cual ser amada y protegida.
Una gran amistad une a Chuck y a Sticky
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