Cuando vemos un perrito deambulando por las calles siempre habrá alguien de buen corazón que actuará y querrá darle una mejor vida. Algo similar pasó en el centro de Ocean Springs, Mississippi, los residentes tenían días viendo una animalito caminando por las calles e intentando hacer vida en algunos patios traseros.
Un extraño animalito con características a la de un perrito abandonado.
Debido a la extraña apariencia del animalito los vecinos no tenían claro de qué se trataba, unos decían que era muy pequeño para ser un coyote, otros afirmaban que se trataba de un perro, incluso algunos sugirieron que se trataba de un chupacabra. El misterioso del animalito se logró resolver cuando Missy Dubuisson, fundadora y directora de Wild At Heart Rescue, vio una foto del animalito.
«Esto no es un chupacabra. Este es un zorro sin pelaje. Pero no se ven animales sin pelaje aquí ni en ningún otro lado, y si lo hacen, generalmente, tienen un problema: una enfermedad autoinmune o algún tipo de problema de la piel”.
La especialista pudo determinar que el pequeño animalito sufría de sarna demodéctica, una enfermedad causada por los ácaros que puede aumentar si el animalito tiene estrés o está en una zona con mucha calor, aunque el animal que la padece tiene una apariencia bastante desagradable, esta enfermedad se trata fácilmente, el mayor reto en este caso era atrapar al zorro.
Su cuerpo era muy frágil, no tenía pelaje y estaba cubierto de costras.
Pensaron en llamar alguna comisión de rescate pero se corría el riesgo de que fuera sacrificado. Una rescatista de gatos no permitiría que algo así pasara así que diseñó una trampa especial camuflageada con ramas, también instaló una cámara para seguir de cerca los movimientos del zorrito.
Dubuisson señaló que normalmente los zorros evaden las trampas.
Después de 50 días el curioso zorro cayó en la trampa alegrando a todos los rescatistas de poder encontrarlo y brindarle la ayuda que se merece. Los primeros días el animalito se mostraba esquivo y con miedo, con el paso del tiempo los rescatistas se han ganado su confianza y ahora se deja hacer la curas con mayor facilidad.
Los rescatistas esperan que en poco tiempo logre recuperarse del todo, su piel luzca bien y tenga la fuerza necesaria para poder cazar, en cuanto esté totalmente sano será liberado cerca del área donde fue encontrado ya que es su área familiar.
Margaret Raines fue la responsable de crear la trampa con ricos bocadillos para el zorro.
Por el momento el pequeño zorro está feliz de haber recibido la ayuda que tanto necesitaba. Ojalá y más personas tengan el mismo compromiso y entusiasmo de salvar a los animalitos que lucen diferentes pero que desean ser rescatados.
Anímate a compartir la nota para que más personas conozcan la historia de un zorrito que buscó la manera de sobrevivir hasta tener la ayuda correcta.