La vida para la mayoría de las vacas no suele ser nada sencilla. Pasan años y años sometiéndose a todo tipo de tratos injustos mientras sus dueños se valen de ellas para sacar el mayor provecho económico.
Afortunadamente, cada vez son más las personas que deciden alzar la voz y han logrado que muchas conozcan una nueva vida en los santuarios y en la naturaleza.
La vaca del vídeo se llama Emma.
En cuanto quedó embarazada, comenzaron a valerse de esta linda vaca para extraer su leche. Esto significa separarla de sus crías lo cual la afectó profundamente. En la mayoría de los casos, cuando las vaquitas alcanzan una edad muy avanzada son trasladadas al matadero en donde ponen fin a su vida de una manera muy dolorosa.
«No solo estaba triste, estaba aterrorizada»
Después de tantos años, estos animales parecen saber cuál será su terrible destino. Cuando la vaquita dejó de dar leche, la subieron a un camión para su traslado. De inmediato, la pobre comenzó a sentir mucho miedo.
En su mirada se puede ver que se encuentra verdaderamente aterrada e incluso comienza a llorar en un desesperado intento de pedir ayuda.
La vaca vive en la región de Overath en Alemania.
Al contrario de lo que muchos creen, los animales tienen sentimientos y tras una vida tan difícil sufren ante el constante estrés y miedo que significa su día a día. La vaquita estaba segura de que la llevarían al matadero pero la realidad era muy diferente.
Fue salvada y la trasladarían a un santuario en donde podrá pasar sus últimos días de manera digna y tranquila.
La fundación fue fundada en 2011 con la meta de que las vacas no tengan una vida de «ganado».
Se trata de la organización Kuhrettung Rhein-Berg Sanctuary. Una vez que llegaron allí la dulce vaca no creía lo que sus ojos estaban viendo. Se traba de un lugar hermoso, lleno de áreas verdes en donde sería completamente libre.
“Es muy hermoso saber que estos animales podrán tener una nueva vida y que sólo partirán de este mundo por causas naturales”.
En cuanto comenzó a explorar su nuevo hogar, varias vacas se acercaron a ella y se olieron. Después de unos minutos, todo parecía indicar que se llevará de maravilla con la manada y que podrá disfrutar de la vida que tanto se merece.
El santuario ya ha rescatado casi 30 vaquitas lecheras a punto de ser sacrificadas.
Esperamos que la linda vaquita pueda vivir ahora al máximo y que su caso nos ayude a crear conciencia sobre el enorme estrés al que estos animales suelen ser sometidos.
No dudes en compartir esta nota para apoyar a Emma y a tantas vaquitas que merecen disfrutar de una vida sin sufrimiento.