Todos aquellos que aman los animales encuentran el amor ideal en mascotas como perros o gatos, pero existen personas que encuentran el amor de sus vidas en animalitos que las reglas de nuestra sociedad no consideran como domésticos.
Todos los animalitos por muy diferentes que sean necesitan atención.
Sin embargo, Carly Henry contradice estas reglas. Cuando se enteró de que un ternero de 2 semanas enfermo y hambriento había sido confiscado en una investigación por negligencia animal, ella inmediatamente acudió al lugar y pensó en adoptarlo.
“¡Realmente quería una vaca! He oído que la gente dice que el amor de una vaca es lo mejor”.
Henry es encargada de Carly´s Critter Camp, un santuario de animales en Austin, Texas. Su vocación la lleva a rescatar animales de todo tipo bridándoles apoyo y amor en su granja. Pero el dulce ternero necesitaba un cariño especial y ella estaba dispuesta a dárselo.
Un amor que surgió incluso antes de verla.
El pequeño ternero viviría en casa con los perros, los gatos y el esposo de Henry. Ella estaba convencida de que quería tenerla en casa. Solo pensaba en cuidarla y alimentarla con biberón.
Una foto del ternero cubierto con mantas lo hizo aún más irresistible ante la pareja.
El esposo de Henry dudó por un momento pero al final terminó apoyándola. Contactaron a la persona que ayudó a salvar al dulce ternero y empezaron todos los arreglos para la adopción. La llamaron Tulip y el amor surgió a los pocos segundos de tenerla en casa.
“Él la amaba. Estábamos todos enamorados a los 30 segundos. Ella nos estaba besando y acariciando, le encanta que le froten las orejas”.
Tulip se adaptó perfectamente a los demás animales de la casa. Para su sorpresa, Tulip encontró comodidad en un lugar compartido y acogedor.
La cama del perro fue su mejor elección.
El dulce ternerito probó todas las camas de los perros que había en casa, le encantaba acomodarse y acurrucarse con ellos. El esposo de Henry incluso se entretenía al ver la adaptación instantánea de Tulip, parecía que el ternerito creaba su propia vida hogareña y formaba parte de la familia.
Una vaca en la cama de un perro no es nada común.
La pareja, al notar que a Tulip le encantaban las camas de los perritos, decidieron comprarle su propia cama. Por supuesto, muy parecida a las de los hermosos peluditos.
“En un minuto descubrió su nueva cama. Colgó sus patas delanteras y vio que esa sería su nueva cama”·
El tiempo pasaba y Henry seguía alimentando a Tulip con biberón. Cuando la pequeña Tulip fue confiscada tenía neumonía y estaba muy débil. Gracias al cuidado y todo el amor que le dio Henry, Tulip ya está más fuerte
Solo con amor se pueden recuperar las fuerzas.
Tulip se ha convertido en un animalito muy social en la granja. Poco a poco se ha hecho amiga de todos los animales.
Por muy diferentes que sean, si la amistad es verdadera los obstáculos no existen.
Tulip es muy visitada en la granja, se emociona aún más cuando un grupo de niños se acerca a abrazarla y alimentarla. Sin duda, es un animalito muy dulce y tierno.
Un biberón cargado de amor es la mejor opción para la cura.
Afortunadamente Tulip contó con el apoyo de una amante de los animales. Ahora luce sana y fuerte. ¡Qué bueno que aún existen personas que saben que el amor es la clave pasa salvar a los animalitos necesitados!
Ayúdanos a compartir la nota para que todos conozcan las aventuras de Tulip y más personas se motiven a ayudar a los animalitos más indefensos.