La vida en comunidad puede no ser la mejor para algunas personas, pues hay quienes parecen no adaptarse a las normativas mínimas que se requieren para llevar una relación cordial con los vecinos. En esta ocasión un hombre pasó todo tipo de límites y en un ataque de ira terminó por agredir a dos indefensas criaturas.
Se trata de dos mastines de canarias adultos y mascotas de una maestra francesa.
Christelle todavía estaba en el trabajo la tarde del 18 de febrero, cuando recibió una terrible llamada. Su perrita discapacitada de 11 años de edad, Fatale, había perdido la vida en manos de uno de sus vecinos.
«Cuando recibí la llamada de la gendarmería, estaba en estado de shock», reveló la mujer.
Christelle vive en la Villeneuve-sur-Auvers, en Essonne (Francia), fue alertada por las autoridades después de que un testigo de la arremetida decidiera reportar el hecho.
Al parecer, la peluda se metió en el patio trasero del hombre que optó por quitarle la vida, un acto cruel e inaceptable que ha arrancado el corazón a esta amante de los animales.
La violencia no tiene ningún tipo de justificación.
Para acrecentar su dolor, Christelle también fue alertada sobre la desaparición de su otra mascota: Morris. El mastín macho había desaparecido, sin dejar ningún tipo de rastro aparente.
“Estaba molesta. Mis perros no eran agresivos en absoluto, al contrario. Fatale estaba discapacitada debido a su edad. Me lo imagino tratando de escapar y sin poder… Me hierve la sangre”, dijo la maestra entre lágrimas.
Después del ataque, Chris inició una ardua búsqueda con sus familiares y amigos para dar con el paradero de Morris. Tras la difusión de una fotografía en redes, un hombre pudo reconocerlo mientras paseaba a su perro en un bosque cercano.
Aunque su corazón se alegró por haberlo hallado con vida, la mujer debió prepararse para una segunda dolorosa embestida.
Morris también había sido atacado por su vecino.
El peludo presentó impactos de proyectil en diferentes partes de su cuerpo. Contrariamente a Fatale que debido a su discapacidad fue impactada en su mandíbula y cráneo, Morris huyó.
“Pude, no sin dificultad, recuperarlo y hacer que lo trataran en el veterinario. Morris presentó numerosas lesiones que fueron reveladas en las radiografías. Incluso tenía proyectiles metálicos como munición de caza», declaró la mujer.
Christelle presentó una acción civil contra el hombre con el asesoramiento de la Fundación 30 Millions d’Amis.
El desalmado autor de estos actos se encuentra bajo supervisión judicial y deberá enfrentarse a un juez en pocas semanas por los cargos de “acto de crueldad hacia un animal doméstico” y por “posesión sin declaración de arma, municiones o sus elementos de categoría C”.
El motivo que llevó a los perros de Christelle a invadir el jardín de su vecino es aún un misterio, pero nada podría justificar la acción de este hombre, comparte esta lamentable historia y ayuda a que se haga justicia.