Una madre elefante desesperada pide auxilio para su bebé que cayó a un profundo hoyo

No hay amor más grande que el de una madre, hará casi cualquier cosa para proteger a su hijo.

Un bebé elefante se encontraba librando una batalla para sobrevivir después de haber caído accidentalmente a un pozo.

La madre trató en vano de sacar a su pequeña cría, no le quedó otro recurso que pedir ayuda.

Comenzó a barritar fuertemente logrando alertar a los aldeanos, que viendo la insistencia y angustia del animal, decidieron averiguar el motivo de su preocupación.

Así comienza la emotiva historia del rescate que te hará recobrar la fe en la humanidad.

Podemos ver que no todo está perdido cuando hay personas que acuden enseguida al llamado de auxilio de un animal y están dispuestas a todo para salvar una vida.

Aproximadamente, a las dos de la madrugada de ese día, una manada de unos 40 elefantes salvajes, se adentró en una plantación de caucho de la provincia de Chanthaburi de Tailandia, probablemente en busca de alimento.

Una cría cayó accidentalmente en un pozo de 3 metros de profundidad.

Siriman Sripen, de 29 años, que vive a 200 metros del lugar donde cayó el elefante, dijo:

“Estamos acostumbrados a la presencia de elefantes en la zona, pero me desperté porque escuché que la madre elefante mostraba angustia. Estaba de mal humor y desconcertada porque el bebé había caído en el hoyo. Entonces llamé al personal de vida silvestre”.

Los presentes trataban de comprender lo que le pasaba, la madre en medio de su desesperación se topó con unos cables y sufrió una descarga que la tumbó al suelo, afortunadamente los hombres cortaron de inmediato el suministro de electricidad. Tras varios minutos de incertidumbre, se recupera.

Ante la insistencia de la madre, el grupo decide seguirla, y a medida que iban acercándose pudieron escuchar otro barritar más débil; se dieron cuenta que en el fondo del pozo un bebé elefante lloraba tratando de salir y mantener su cabeza fuera del agua, pero la falta de espacio y la profundidad lo hacían seguir cautivo.

Aunque no era un pozo muy profundo, los rescatistas tuvieron que introducir maquinaria. Los aldeanos y los funcionarios se pusieron en acción, y con la ayuda de una retroexcavadora cavaron una gran pendiente para permitir que saliera.

«Recibimos un informe a las 3 am sobre el elefante bebé atrapado en el agujero. El personal coordinó el uso de la excavadora para liberar a la cría lo más rápido posible”, dijo Boonnak Pimmuang, jefe de cuidado de elefantes en el bosque del distrito de Kaeng Hang Maeo.

Completamente cubierta de lodo, la criatura estaba muy asustada, no se quedaba quieta, lo que representaba un riesgo, cualquier movimiento en falso podría ocasionar un grave daño al bebé.

Con cuidado para no herirla y nervios de acero para cavar con precisión, la excavadora empezó a romper el bordillo del pozo y abrir una zanja para que pudiera trepar y escapar. Después de unos 30 minutos de excavación, el pequeño sacando todas sus fuerzas pudo impulsarse y ascender con sus patas hacia la superficie.

La madre observa y espera de cerca muy pendiente de todo lo que ocurría con su bebé.

Al principio se le ve desorientado, pero luego escucha la voz de su madre que lo espera con ansia, y corre hacia ella.

Todos celebran la hazaña entre gritos y aplausos. Aunque no pudieron dormir, están felices por salvar al pequeño elefante que pudo regresar a la vida salvaje.

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Justo antes del amanecer, después de varias horas de desesperación madre e hijo lograron reunirse y adentrarse en la jungla con el resto de la manada que los esperaba.

Desafortunadamente, este es uno de los peligros a los que han tenido que enfrentarse los elefantes mientras buscan comida con sus familias.

Sigamos compartiendo buenas noticias por todos los que protegen a los animales.