El instinto que tienen nuestros amigos peludos es realmente impresionante, ellos son seres muy especiales con un gran corazón siempre agradecido, especialmente con quienes le han cuidado con amor.
Esta historia nos narra un maravilloso reencuentro entre Kate Howard y Winnie, una hermosa perrita que acogió en su hogar.
Kate regresaba de un funeral y decidió descansar el resto de la tarde sentada afuera de su casa cuando sucedió lo más inesperado.
Frente a ella se sentó en el césped una adorable pittie marrón con manchas blancas.
«Hoy estaba sentada en mi porche, disfrutando del sol después de regresar del funeral de un amigo que partió muy pronto. Una mujer y su mascota se detuvieron, y la perrita se dejó caer sobre mi césped», escribió Kate en Twitter
Today I was sitting on my porch, enjoying the sunshine and the rest of my day off after returning from the memorial service of a friend who died far too soon. A woman and her dog stopped at my yard, and the dog plopped down on my grass. 1/
— Kate Howard (@JournoKateH) October 15, 2019
De inmediato, Kate sintió algo especial, la pequeña perrita tenía algo muy particular, pero simplemente no lograba identificar que era.
«La perrita era linda, de pelaje marrón con manchas blancas. Todos los perros son perfectos pero ella era particularmente encantadora. Su dueño estaba tratando de entusiarmarla nuevamente en el juego, pero ella se quedaba quieta», publicó Kate en Twitter
Today I was sitting on my porch, enjoying the sunshine and the rest of my day off after returning from the memorial service of a friend who died far too soon. A woman and her dog stopped at my yard, and the dog plopped down on my grass. 1/
— Kate Howard (@JournoKateH) October 15, 2019
No fue hasta que le dijo: «¡Winnie! ¡Vamos!” que Kate se dio cuenta de por qué le parecía tan familiar. Hace casi un año, Kate había criado a una adorable perrita de Louisville Metro Animal Services con el mismo nombre.
«En noviembre pasado acogí por primera vez a una perrita durante el Día de Acción de Gracias que llamé Winnie. Lloré durante tres días después de que la hubieran esterilizado y fui a la adopción, porque me preocupaba si había encontrado un buen hogar», escribió Kate en Twitter
This immediately registered because last November, I fostered a dog for the first time over Thanksgiving. She was a soft wiggly baby puppy I named Winnie. I cried for three days after she was spayed and went up for adoption, worrying about whether she had found a good home. 3/ pic.twitter.com/KDFiHKcGzG
— Kate Howard (@JournoKateH) October 15, 2019
Durante esos días Kate cuidó de Winnie con mucho amor y le brindó un cálido hogar, le enseñó a hacer pis afuera y a dormir en su camita.
«Ella progresó ante mis ojos de una manera increíble».
Aunque Kate estaba consciente que no podía quedarse con Winnie porque su perro Foxy prefería ser el único cachorro en la casa, la despedida con Winnie no dejó de ser dolorosa.
Era evidente que Winnie había reconocido a Kate meses después y se negó a alejarse de su césped. Realmente es un encuentro especial y sorprendente, sin lugar a duda, el sentimiento era mutuo. Kate se acercó al dueño de Winnie para narrarle la historia.
«Resulta que la madre de Winnie había perdido un perro recientemente cuando se enamoró de la preciosa cara de Winnie tras verla en la web de servicios para animales. El día de la adopción llegó temprano para garantizar de ser la primera y adoptarla cuando estuviera disponible», dijo Kate.
Kate está muy feliz de que Winnie haya encontrado el hogar que se merece y muy cerca de su casa, agradece que su madre haya aceptado visitarla para que ella pueda verla.
«Fue más que reconfortante que apareciera en mi jardín. Su pelaje aún estaba suave, su oreja seguía torcida y su cola no dejaba de moverse”, dijo Kate.
Es una historia muy emotiva y especial que demuestra que cuando las cosas se hacen con amor florece un vínculo que permanece en el tiempo. Compártela como una celebración de la existencia del verdadero amor y amistad.