Laura y Marina son dos bebés rescatados que aunque tienen muchas diferencias físicas, su corazón es idéntico: lleno de amor. Ellas tuvieron episodios de dolor y abandono pero gracias a esta granja en Santiago de Chile llamada Santuario Igualdad Interespecies, ahora su vida está llena de alegría y color.
En esta granja hay un principio inquebrantable: la igualdad. Ellos tienen espacio para todos y qué mejor muestra que este dúo, Marina y Laura, que se han convertido en hermanas inseparables; cada día se hace más fuerte su vínculo.
Marina fue rescatada por un buen samaritano después de ser abandonada en la calle recién nacida, llegó al refugio y no estaba claro que sobreviviría, pero el equipo de rescate se aseguró de hacer todo lo posible para salvarla. ¡Y lo lograron!
Y Laura, la cerdita, nació en el seno de la industria de la carne, pero tuvo la suerte de ser rescatada y trasladada al refugio. Pero por desgracia, su madre no está con ella así que los voluntarios se encargan de alimentarla tal como amerita su poco tiempo de nacida y mantenerla abrigada.
“Laura ha sido tratada con todo el amor y cuidado que un bebé se merece y ha formado una profunda amistad con Marina, mostrando que cuando se trata de amistad y respeto, no importa a qué especie pertenecen”, comentó una voluntaria del refugio.
Si quieres conocer más acerca de este maravilloso lugar, puedes visitar su página de Facebook aquí, además seguirás muy de cerca los pasos de Marina y Laura. ¡Es imposible no quererlas!
Y si quieres saber cómo colaborar con el refugio, puedes conocer su página web aquí. Su labor es grandiosa y admiramos cómo a través de un ejemplo tan hermoso como este par de animales tan tiernos, promueven el respeto a la vida y la igualdad.
Ellas nos regalan una importante lección, así que no esperes más para compartirla, además nos llenan el corazón de ternura.