Mucho se ha dicho sobre la supuesta antipatía entre gatos y perros, pero hay cantidad de historia de canes y felinos que demuestran que no siempre es así. Una prueba de ello quedó reflejada en un hermoso video que circuló por las redes sociales, lo que hizo una perrita ante cuatro gatitos hambrientos llegó hasta el alma de miles de personas.
Queda en evidencia que los prejuicios no unen, más bien separan, en el caso de los pitbulls, por ejemplo, se ha dicho especialmente que son agresivos. Los expertos han explicado muchas veces que, en realidad, su comportamiento obedece a los tratos que han recibido en su crianza, si son amados y tratados con cariño, aprenderán a ser dóciles y sociables.
Y si por el contrario reciben malos tratos desde que abren los ojos al mundo, su mecanismo de defensa podría ser una reacción violenta ante eso.
Una perra pitbull de ojos brillantes y mirada lánguida demostró que más allá de la razas y especies existen lo sentimientos y la ayuda entre los seres vivíos. Estaba amamantado a cuatro hambrientos mininos que por alguna razón no estaban con su madre.
Los gatitos no tuvieron ningún temor al estar cerca de ella
No hay palabras que puedan describir la dulce y resignada actitud de la perrita, ante el jaleo de los pequeños motuditos que palpaban ansiosos con su diminuta lengua el pezón canino. Seguramente había sido madre recientemente ya que estaba produciendo leche. Cuando el video fue compartido los internautas se enternecieron admirando la nobleza del animalito.
“¡Es lo más hermoso, demuestra el amor que puede dar sin importar si son sus hijos o gatitos! Tenemos tanto que aprender de estos seres maravillosos llenos de amor, ojalá aprendan los seres humanos a ser como ellos y no descuiden tanto a sus mascotas que no las cuidan ni las aman como a hermosos seres vivos que son”, dijo una expresiva usuaria.
Otro detalle que no se puede dejar pasar por alto es que los gatitos no daban la menor muestra de desconfianza, dejaban oír sus maullidos, pero no de temor sino más bien expresando que estaban a gusto y tranquilos como si la linda perrita fuera su verdadera madre. Y ella lo acepta con tanta dulzura y bondad perruna.
“Eso, eso, es AMOR con mayúsculas, amor puro, incondicional, desinteresado, lea y sincero. Creo que, si la gente amara como ellos, seríamos mejores personas sobre todo más humanos», añadió otra emocionada internauta.
Les deseamos una vida larga de amistad canina y gatuna, para que sigan disfrutando de su compañía y demostrándole a las personas que, si se pueden conciliar las diferencias, cuando ponemos lo sentimientos por encima de cualquier otra cosa.
Alégrale el día a tus amigos compartiendo con ellos esta encantadora historia, para que siga creciendo en su corazón el amor hacia los animales.