El perro, el mejor amigo del hombre. La vaca, fuente de alimentos: no hay duda de que los seres humanos y los animales, somos inseparables. A lo largo de los siglos, hemos crecido juntos y nos necesitamos mutuamente.
Un ejemplo de la estrecha relación que se conforma entre un hombre y su perrito rescatado de las inclementes calles, se pudo observar a través de un video publicado por el grupo Dogspotting. Un motociclista lleva a su peludo camarada Buddy acurrucado en el asiento de la moto, como todo un valiente, por las calles de Bishan, Singapur.
Dogspotting es un grupo de fotógrafos especializados en captar escenas conmovedoras y lindas historias para darlas a conocer en la Web. En este caso, fue uno de ellos el testigo del adorable momento, tras hacer un alto en un semáforo en rojo. Un instante ejemplar de lealtad a toda prueba.
La afortunada fue una mujer de nombre Samantha Coong, quien narró lo acontecido mientras cambiaba la luz de roja a verde. Dijo que se sorprendió con la actitud del perrito, quien se mostró cómodo y muy a gusto al lado de su cuidador motorizado. La escena es realmente hermosa.
“Mientras esperaba la luz verde en un semáforo me asombré al ver al perrito tan feliz y despreocupado en la moto. No pude evitar fotografiar la hermosa escena de amistad”, aseguró Samantha.
Y es que, una vez que un perro sabe quién lo quiere y lo cuida, no se despegará de su lado jamás. Así lo demostró Buddy, quien sigue a su padre humano a donde quiera que va. Qué duda cabe: comparten la adrenalina, el viento es su rostro, pero sobre todo, una gran amistad.
Un ejemplo de valentía y mucho amor, pues no todos amamos andar en dos ruedas. Sin embargo, este peludo iba muy seguro y confiado en su mejor amigo, lejos de cualquier cosa que lo pudiera hacer sentir atemorizado.
“El temor no era precisamente el sentimiento que reflejaba su cara. Nunca me había sentido tan feliz de estar en un semáforo. Se aferra al hombro de su humano con una pata”, añadió Samantha Choong en la publicación.
Al ver las tiernas imágenes, se puede uno dar cuenta de que el perrito, no solo está envuelto en una especie de saquito especial para viajes, sino que, además, porta unas gafas para motorista canino, excelentes para ir a gran velocidad, con su cabecita apoyada en el hombro del piloto.
La escena es, sin lugar a dudas, una adorable expresión de nobleza, de cariño mutuo y confianza a toda prueba. Una como pocas, ya que, de hecho, no resulta muy frecuente ver en Singapur este tipo de episodios de perros viajando por la carretera en motocicleta.
Comparte esta épica historia con tus amigos. La de un perrito rápido y confiado, quien se robó miles de corazones al hacerse viral.