La caza furtiva es una de las prácticas que todo amante de los animales, y cualquier persona que tenga un mínimo de sentido común y de respeto por otra vida, jamás terminará de entender.
Los cazadores hacen de las suyas cargándose vidas inocentes. Y nadie puede hacer nada por esas criaturas que pierden la vida, a costa de su diversión, ya que muchas veces se pavonean con sus restos sin vida a modo de trofeo.
Pero por suerte, también es cierto que el karma existe. Y más temprano que tarde, la propia naturaleza se encarga de cobrar las injusticias, y lo mejor de todo, es que muchas veces eso sucede más rápido de lo que el cazador se imagina.
Es lo que le sucedió a este sujeto en un día que prometía ser, dentro de sus mezquinos fines, el más feliz. Se entretenía practicando la caza desde un helicóptero, una práctica muy extendida en África, pero que no hace más que desvelar su cobardía.
El hombre sobrevolaba muy bajo con a fin de perseguir a unos atemorizados ciervos, que huían despavoridos al oír el sonido de la aeronave, y el estruendo que hacía el rifle que sostenía el cazador.
Un video recoge el momento en que el hombre, «envalentonado», se acerca para apuntarles sin ningún pudor, por más que era testigo de cuánto estaban sufriendo los animales.
Incluso, en un momento uno de los ciervos trata de esconderse en un arbusto, ya que teme por su vida. Pero el escándalo es tal que tiene que salir huyendo debido a la proximidad del helicóptero.
El cazador no contó con el efecto «rebote» que producen las herramientas de fuego al apuntar, ya que debido a la fuerza provocan la retirada hacia atrás de quien las sostiene. Algo que este ingenuo y malvado hombre no fue capaz de prever.
Por lo que cuando el sujeto pensaba que ni bien apuntar tendría a su presa sin vida para llevársela como trofeo, más rápido que canta un gallo, cayó al suelo entre los arbustos, haciéndose un daño importante.
Sin duda, el karma instantáneo que se lo tenía más que merecido
Se puede escuchar al hombre proferir una serie de palabras que no se llegan a comprender, pero que seguro que buenas no son. Son quejas de dolor debido a las contusiones que muy probablemente recibió debido a la fuerte caída.
No se sabe el destino de los animalitos, si llegaron a ser heridos, o si lograron recuperarse. Pero lo que es cierto es que el hombre por lo menos recibió el mayor susto de su vida. Y esperamos que se le quiten las ganas de cobrar vidas inocentes por un buen tiempo.
Este tipo de caza desde las alturas es lo más ruin que existe si cabe un calificativo. Si por lo menos se enfrentaran cuerpo a cuerpo, en igualdad de condiciones, pero no. Tienen que recurrir a protección extra porque la palabra cazador les queda grande. ¡Compártelo!