No hay nada como la hermosa conexión que existe entre un leal perrito y su dueño. Esto es algo que suele perdurar más allá de cualquier circunstancia y un perrito llamado Menino lo demostró.
Se encontraba con su dueño cuando sufrieron un inesperado accidente automovilístico. El hombre perdió la vida pero el dulce Menino se negaba a separarse de él.
Menino vive en Mato Grosso do Sul al sur de Brasil.
En cuanto las autoridades llegaron, no se dieron cuenta de que el perro se estaba escondiendo en el auto. Lo enviaron al depósito sin imaginar que el leal perrito seguiría viviendo allí día y noche.
No entendía lo que había sucedido y sólo quería quedarse para esperar a su dueño. Por suerte, Menino conoció a David Guimarães Santos, el encargado de la seguridad en el depósito.
David llegó cuando Menino ya llevaba cuatro meses viviendo el auto.
El angustiado perro estaba muy nervioso. No dejaba que nadie se acercara a él y temblaba constantemente.
Todavía se encontraba aterrado por la dura experiencia del accidente y sólo quería reencontrarse con su dueño para volver a su vida normal. David se dispuso a cuidarlo, pero sabía que este dulce perrito necesitaba de mucho más.
“Quería que llegaran sus dueños, pero después me rendí”.
Contactó a los familiares del antiguo dueño de Menino. Todos aseguraron que irían a buscarlo pero nunca cumplieron con su palabra. Por suerte, el nuevo vigilante era un gran amante de los animales así que todos los días se acercaba a Menino y poco a poco se fue ganando su confianza.
«No podía dejarlo ahí», dijo el trabajador.
El amor del perrito por su dueño era enorme. Realmente parecía que nadie lo sacaría de allí. David comenzó a darle comida y se aseguró de que nunca le faltara nada.
Sin embargo, todo cambió cuando David consiguió un nuevo trabajo. No quería dejar al leal perrito expuesto a su suerte, después de todo ya se habían convertido en grandes amigos.
Menino fue adoptado cuando llevaba 10 meses viviendo en el depósito de autos.
Sin pensarlo más, David tomó a Menino en sus brazos y lo llevó a su casa. Después de diez largos meses, este leal perrito finalmente dejó el auto de su antiguo dueño. Ya era hora de disfrutar de su nueva familia y de un lugar lleno de amor.
“Ahora todo es alegría. Cuando llego a casa me saluda con mucha felicidad. No para de saltar”.
Después de pasar por una experiencia tan difícil, este dulce perrito necesitaba a alguien como David para continuar con su vida.
Celebramos el enorme corazón de todas las personas que se aseguran de cuidar a los perritos, especialmente a aquellos que lo han perdido todo.
¿Qué opinas de la historia de Menino? Comparte esta nota para celebrar este final feliz. Menino merecía continuar con alguien que lo quisiera tanto como su antiguo dueño.