Richard Ewers es un amoroso hombre que dedicó su vida a ayudar a los perritos de la calle. A pesar de que no contaba con mucho, Richard siempre sintió una conexión muy especial con todos los animales y supo cambiar la vida de decenas de perros sin hogar.
Richard vivía en el estado de Texas en los Estados Unidos.
Abrió las puertas de su casa para asegurarse de que muchos perritos contaran con un techo en donde lograran reguardarse de los estragos del clima. También se esforzó día y noche para poder darles comida y mantenerlos lo más felices posible.
Richard tenía bajo su cuidado a un total de 27 perritos.
Lamentablemente, la salud de Ewers comenzó a decaer y una vez que se sometió a una serie de pruebas médicas fue diagnosticado con cáncer. El estado de su condición era sumamente avanzado y cuando recibió la noticia contaba con tan sólo una semana más de vida.
El cáncer de Richard empezó en su estómago.
Cualquier persona reaccionaría a estas duras noticias entrando en negación o en un total estado de shock. Richard, en cambio, sólo se preocupó por asegurarse de que sus perros fuesen adoptados para que nada les pasara en su ausencia. Fue trasladado a un hospicio en donde le dieron las atenciones necesarias para aliviar su dolor, pero para él lo único importante era velar por el futuro de sus perritos.
Richard tenía 71 años de edad cuando empezó a enfermar.
Con sus pocas fuerzas restantes, pidió una y otra vez lo que era su último deseo: un hogar para cada uno de los perritos. Su conmovedora historia no tardó en llegar a los oídos de miles de amantes de los animales así que muchas organizaciones se dirigieron de inmediato a su casa para ayudarlo con el proceso de reubicación de sus mascotas.
«Esto nos entrice mucho, pero queremos ayudar a hacer realidad el último deseo de Richard».
Mary Oyler, una rescatista de Save Our Strays, se dedicó a visitar todos los días a los perritos y también se dirigía al hospicio para explicarle a Ewers cómo avanzaban cada vez más en el proceso de buscar un hogar para sus amados perros. A través de una página de Facebook publicaron las imágenes de los perritos que necesitaban ayuda.
“Lamentamos informar que Richard falleció anoche. Creemos que ha partido con algo de paz al saber que sus perros serían cuidados. Recibimos la noticia después de comunicarnos con un santuario que tomaría a los perritos que faltan por reubicar”.
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Por desgracia, Richard partió de este mundo cuando todavía faltaban algunos perros por ser adoptados así que no pudo ver su sueño hecho realidad. Sin embargo, las organizaciones de rescate no dejaron de trabajar en honor a su memoria y hoy en día todos sus perritos se encuentran sanos y salvos en sus nuevos hogares.
Los últimos perritos fueron recibidos por una fundación de cuidado animal de Nebraska.
Lamentamos la partida de este hombre tan especial que dedicó su vida a cuidar de tantos perritos de la calle.
Comparte esta historia para honrar la memoria de Richard y celebrar el enorme trabajo que se hizo salvar a tantos perritos que iban a quedar desamparados sin él.