Existe la creencia de que los perros y los gatos no se llevan para nada bien, pero eso no es del todo cierto. Y eso quedó demostrado cuando una minina en los Estados Unidos se convirtió en la mejor amiga de tres canes, las imágenes enternecieron a todos los usuarios de las redes sociales.
Su amistad es fascinante
Cierto día, una joven en california de nombre Thi Bui, encontró en la calle a una hermosa y diminuta gatita con apenas tres semanas de vida. Al verla indefensa y en condiciones tan precarias la recogió y llevó con ella a casa, donde vive con sus hermanas Thoa y Tram, y tres hermosos Huskies siberianos.
Las hermanas Bui aman a los animales, y no es la primera vez que rescatan a algún animalito de la calle. De hecho, siempre están realizando actividades para ayudarlos y tiene una cuenta especialmente dedicada a todo lo que tiene que ver con eso.
“Desde que éramos pequeños, ¡acogíamos a los perros callejeros y los alimentábamos! ¡Recaudamos dinero vendiendo moños y pañuelos para perros y todas las ganancias se destinan a nuestros proyectos TNR que hacemos para gatos salvajes! Puede seguir nuestros proyectos TNR en Finnysfinds en Instagram», dijo la rescatista de la gatita.
Al principio, las esperanzas de que la motudita se salvara eran muy escasas, pero ellas pusieron todo su empeño en cuidarla y atenderla. Y al llegar a casa lo primero que hicieron fue presentarla a sus tres hermosos y juguetones Huskies siberianos.
Fue amistad a primera vista, los peludos se encariñaron de inmediato con Rosie, así llamaron las hermanas a la nueva miembro de la familia. Y Lilo, una de los perritos, la adoptó como si fuera su hija y no se apartaba de ella ni un momento, hasta que por fin empezó a abrir sus diminutos ojos y pudo caminar por sí sola.
“Casi no sobrevive la primera noche. Parecía aletargada y floja, aunque cuidáramos de ella constantemente. De este modo, decidimos jugárnosla y dejarla acurrucada con Lilo. Milagrosamente, Rosie empezó a tomar leche de Lilo, convirtiéndose esta en una auténtica madre”, expresó Thi.
Desde el primer día, la joven mujer ha dejado evidencia fotográfica y en videos de los avances de Rosie y el sin número de divertidas aventuras y jugueteos mientras salen a caminar, de paseos al parque, a la montaña y viajes a la playa. Las imágenes son realmente encantadoras.
Para la amistad no hay imposibles
No hay dudas de que los cuidados de Lilo, y el amor de los demás han beneficiado muchísimo a Rosie, se le ve magnifica y está muy feliz.
Comparte esta tierna historia con tus amigos y no olvides que si puede existir la amistad entre un gato y un perrito.