Al igual que ocurre con cualquier policía encargado de mantener el orden, los oficiales K-9 exponen sus vidas para combatir a los criminales. Por ese motivo, no es de extrañar que estos peluditos puedan salir lesionados o incluso perder la vida en nombre de la ley.
Esta situación es la que ha acontecido al pobre Arlo, un pastor alemán de 3 años que estuvo al borde de la muerte.
Por fortuna y el buen corazón de muchos, este chico se salvó.
A principio de este año, Arlo se encontraba en un operativo cuando recibió dos lesiones: un impacto de proyectil en una pierna y otro en su columna vertebral. En ese momento la vida del perro estaba comprometida y necesitaba una operación de emergencia pero el chico no se encontraba solo.
Sus compañeros de oficio y fanaticada lo apoyaron.
Este peludo se había ganado el corazón de muchos a través de su cuenta de TikTok, por ese motivo la ciudadanía no lo pensó dos veces a la hora de colaborar con una campaña de recaudación de fondos que serviría para cubrir todos los gastos médicos que generara la recuperación de Arlo.
Este K-9 presta servicio en la Oficina del Sheriff del condado de Thurston en el estado de Washington por más de un año y no era justo que terminara así.
Gracias a la solidaridad y el gran equipo de médicos, Arlo se salvó.
En redes sociales corrió el vídeo del momento en que fue dado de alta del hospital pero ahora la historia ha tomado un nuevo giro y el público se siente un poco engañado al descubrir que el accidente de Arlo no ocurrió tan como parecía.
Recientemente, el departamento reconoció que el K-9 fue herido por otros de sus compañeros, durante una persecución policial. Evidentemente se trató de un accidente pero algunos cuestionan la razón por la cual no hablaron con la verdad desde un inicio.
Campaña a beneficio de Arlo.
Este tema ha despertado polémica y hay quienes han señalado al Departamento de utilizar la fama del perrito para recaudar fondos en su nombre. La campaña por Arlo logró superar su meta y se cerró con más de $ 73,000 en donaciones.
Esta verdad ha salido a la luz, después de que los informes apuntaran a que el sospechosos Víctor Hugo Ortiz Bucio, de 25 años, no poseía ningún proyectil en el momento de la persecución. No era posible que el hombre que también surgió lesionado fuera responsable de la situación de Arlo.
Los oficiales habrían hecho creer que Ortiz era el culpable del ataque.
Esta situación es bastante delicada y polémica, los policías que participaron en el operativo habían sido suspendidos pero ya han vuelto a sus funciones. Nos contenta saber que este perrito está a salvo pero causa indignación el actuar de estos oficiales y temor pensar que otro “accidente” de este tipo pueda suceder.
Arlo es un guerrero y ya está recuperado pero su caso no deja de sorprendernos, comparte esta noticia y déjanos conocer tu opinión. ¿Deberíamos seguir exponiendo a los perros en estos oficios?