Para Amarildo Silva la falta de recursos no es obstáculo para que con un poco de ingenio y sobre todo un gran sentido de amor por los animales y conciencia de la obligación de hacer algo por el medio ambiente, le haya permitido cristalizar un gran proyecto que ahora ha dado la vuelta al mundo.
El joven de apenas 22 años vive en Paraíba, Brasil, y en su tiempo libre, se dedica a convertir viejos neumáticos en las camas más confortables para mascotas.
Más de un año es lo que este héroe lleva trabajando para conseguir un resultado final impecable, y muchos han aplaudido su grandiosa iniciativa.
Alrededor de 1.000 millones de neumáticos son desechados anualmente en todo el mundo.
La cantidad de basura que se genera es enorme y lo peor de todo es que es sumamente difícil que se degrade; de ahí que la idea del joven por reutilizar esos desperdicios y destinarlos al mejor de los fines ha cautivado a cientos de personas, especialmente a dueños de mascotas del mundo entero.
Hasta el momento, Amarildo ha vendido un poco más de 500 camitas.
“Sólo no vendo más porque no tengo estructura para vender fuera del estado, pero tengo muchas personas pidiéndome de todo Brasil, incluso de muchos países aquí de América, de Europa y de Asia”, relata el ingenioso joven.
A Amarildo, que trabaja como cajero en un tienda, se le ocurrió la brillante idea como una manera de buscar un ingreso extra para su apretada economía. Al ver toda la basura que la gente arrojaba en la calle, con la ayuda de sus familiares, se dispuso a recoger de terrenos baldíos los neumáticos para reciclarlos.
Aunque casi no dispone de tiempi libre debido a su trabajo, en las mañanas fabrica las camas, siempre con materiales reciclados, ya que la sostenibilidad es uno de sus objetivos principales.
El joven no sólo fabrica camas, también hace bocanadas ecológicas, cubos con el tema de la sostenibilidad, basureros y otros objetos.
Amarildo dice que el 90% de los pedidos se atienden desde su página de Instagram @amarildo_silva2. Y tiene claro que quiere seguir con su ambiciosa meta porque no sólo ayuda al medio ambiente, y a los animales, sino también a otras personas necesitadas.
“En las escuelas públicas, ayudo a una ONG que cuida de animales abandonados en mi ciudad, todos los años ayudo a los niños necesitados y me vestí de Santa Claus junto a otros amigos”, relata el joven.
Lo que comenzó como una idea para tener un ingreso extra, ahora se ha convertido en una gran iniciativa de un impacto social impresionante y además darles a los animalitos una opción para una siesta reparadora. ¡Es grandioso!
Si estás interesado en apoyar la gran iniciativa de este chico y te interesa adquirir una de sus camas para tu mascota, puedes ponerte en contacto con Amarildo a través de su cuenta personal de Instagram, en la de su pequeño negocio llamado caominhas_pets2 o en la página oficial..
¡Aplaudamos la genialidad de este joven que merece ser compartida con el mundo!