La lucha contra el coronavirus ha afectado la vida de todos. No sólo hay miles de personas luchando por su salud, sino que también ha generado un impacto muy fuerte en la economía. En estos momentos tan difíciles, no debemos olvidar que hay muchos animales que están perdiendo a sus dueños ante la devastadora pandemia.
“Hemos tenido muchos casos así. Sus dueños perdieron la vida o cayeron demasiado enfermos para cuidarlos. Siempre ofrecemos nuestra ayuda en estos casos”, dijo Victoria Odynsky, gerente de MSPCA.
Ellos merecen recibir ayuda y no quedar en la calle después de pasar años enteros en un hogar donde tenían amor y todos los cuidados necesarios. Esto le ha sucedido a muchos perros y gatitos, pero también a una hermosa tortuga llamada Ms. Jennifer. La dueña de Ms. Jennifer había vivido con ella durante décadas.
La tortuga vive en el estado de Massachusetts, en los Estados Unidos.
Se volvieron mejores amigas y se aseguró de llevarla siempre al Centro Médico Angell Animal para que llevara una vida plena y saludable. Lamentablemente, la mujer comenzó a mostrar algunos síntomas relacionados al COVID-19. Antes de dirigirse al hospital decidió encargarse de algo muy importante para ella. Llevó a Ms. Jennifer a MSPCA y les pidió ayuda.
La tortuga pesa más de dos kilos.
En aquel entonces, ella pensó que podría recuperarse y volver a buscar a su vieja amiga. Por desgracia, perdió la batalla contra el coronavirus. Ahora, la linda tortuga, que el miércoles cumplió 53 años, pero ahora sin su dueña, se encuentra buscando una nueva familia.
Las tortugas morrocoy pueden vivir tranquilamente hasta los 100 años
Los rescatistas de MSPCA la ayudarán y se encargarán de buscar una persona adecuada para ella; pero lo mejor para Ms. Jennifer sería encontrar una casa con jardín ya que así ha pasado casi toda su vida.
“Vamos a cuidarla con mucho amor hasta que le encontremos un hogar adecuado”, explicó Odynsky.
El caso de Ms. Jennifer no es para nada aislado. Los refugios del mundo entero están viendo que cada vez hay más animales que necesitan ayuda. Muchas familias se encuentran pasando por momentos económicos muy difíciles y ya no pueden hacerse cargo de sus mascotas. Otros, simplemente pierden la vida y no tienen con quién dejar a sus perritos.
«Cuidaremos de Ms. Jennifer lo mejor que podamos hasta que logre conseguir un hogar definitivo», prometió Odynsky.
Los animales sienten mucho dolor al no volver a ver a esa persona tan especial para ellos. Es muy injusto que además de tener que pasar por la pérdida de un ser querido, podrían quedar bajo un enorme riesgo sin que nadie los ayude.
Esperamos que Ms. Jennifer logré encontrar un hogar para seguir adelante. No dudes en compartir esta nota para crear conciencia sobre lo mucho que la pandemia está afectando a las mascotas.