Un recién nacido conmueve a cualquiera o al menos a la gran mayoría de las personas, pero no resulta igual en todos los casos, lejos de conmoverse, algunos abusan de la condición indefensa de estos pequeños y cometen los más terribles actos. De tal modo le sucedió a una gatita que fue abandonada pese a tener sólo horas de nacida.
Su nombre es Eve y parece tener un angelito de la guarda que la salvó de una vida de penurias.
Eve fue dejada por su mamita o, en el peor de los casos, separada de ella. Pero una oficial decidió no sólo rescatarla sino hacer lo impensable para lograr que se salvara.
Cuando la mujer halló a la felina, esta tenía aún su cordón umbilical, así que su vulnerabilidad era evidente y por ello la tomó entre sus brazos para reemplazar a su mamá.
El rostro de una buena samaritana.
Esas primeras horas de vida eran súper importantes para que Eve saliera adelante y su mamá no estaba cerca, así que ella decidió suplantarla.
“Cuando llegué tenía bastante frío y estaba realmente preocupada porque su temperatura bajara significativamente. Los gatitos pequeños generalmente confían en el calor de su mamá, pero esta gatita sólo me tenía a mí, así que la metí dentro de mi camisa y la abotoné nuevamente para que pudiera calentarse allí”, dijo la generosa oficial.
La gatita cabía en su mano.
Esta noble samaritana no dudó ni un segundo en hacer de mamá felina, pues era una vida la que estaba en riesgo.
Como en muchos otros casos, en este rescate el tiempo era súper importante pero el hospital más cercano se encontraba a una distancia considerable. Por ese motivo, la mujer tomó a Eve junto a su cordón umbilical para darle calor.
Ahora la gatita es alimentada con un biberón.
De camino al veterinario, la mujer arrulló a la gatita como toda una madre. Aunque no fuese de su especie, el instinto y amor era el mismo, así que no se detuvo cuando pensó en salvarla.
“Era un recorrido bastante largo hasta el hospital y no quería perderla en el viaje. Cuando llegamos al Hospital Animal RSPCA Harmsworth, la pusieron directamente en una bolsa de agua caliente envuelta para que se calentara”, dijo la mujer.
Un voluntario de la Sociedad por la prevención de la crueldad hacia los animales (RSPCA por sus siglas en inglés), se hará cargo de Eve mientras la pequeña toma fuerzas y cumple el tiempo mínimo para ser adoptada.
En cuanto a su verdadera madre los rescatistas aún no saben nada: “No tenemos idea de quién es o dónde está su madre, es probable que fuera una gata callejera y la pobre Eve se quedó atrás”.
Al menos en esta ocasión a la recién nacida no le espera una vida en la calle, sino los cuidados y amor de sus protectores que estarán velando por ella hasta que hallen un hogar definitivo. Eve es sumamente afortunada, pues despertó la ternura de una gran oficial que dejó de lado todas sus ocupaciones para brindarle el calor de madre que necesitaba.
La oficial dio un gran ejemplo de solidaridad y merece ser reconocido, comparte este rescate que le regaló a una pequeña felina un final feliz.