Con tristeza hay que admitir que son muchos los animales que viven en condición de calle, sin que nadie los ayude, pero el caso de este perrito resultó bastante particular. El can de cabello color crema lucía bastante diferente por las dimensiones de su rostro que para muchas personas parecía la cara de un cerdo.
Lo triste es que lejos de ayudar al perrito la gente se burlaba en la zona por su apariencia.
Pero la situación de este peludo cambió en el momento en que un hombre que transitaba por el lugar vio al perro a un lado de la carretera y decidió detenerse.
Su apariencia sin duda lo impresionó pero no solo por curiosidad estaba allí, sino que se preocupó por la salud y lamentable situación en la que vivía el perrito.
Negado a dejarlo seguir bajo esas condiciones, el hombre buscó ayuda.
El samaritano se comunicó con la brigada de rescate de la organización Animal Aide Unlimited India y les planteó el caso. Los rescatistas también se impresionaron por lo que el hombre reportaba a través de la línea de ayuda, pero la sorpresa fue mayor cuando vieron al perrito.
El pobre tenía su cara abultada, como si tuviese muchos cachetes y su cuerpo por el contrario se veía delgado. Es decir, que sus dimensiones no se correspondían y debía haber algo más allá en su aspecto.
Estas personas no se equivocaron.
Aunque el perrito no era agresivo, se alejaba cada vez que los rescatistas intentaban acariciarlo. Estos hombres le ofrecieron un poco de comida para ganarse su confianza, lo cual aceptó de inmediato pero allí se delató el verdadero horror que vivía esta criatura: comer era todo un martirio para el perrito.
En ese instante los voluntarios supieron que debían llevarlo a un centro médico, así el can se resistiera.
Para hacer el asunto un poco más sencillo, aplicaron una maniobra y lograron capturar al perrito con ayuda de una red.
Segundos después lo tenían listo para recibir ayuda pero antes de llevarlo a algún lugar lo acariciaron con la intención de calmarlo y hacerle saber que todo estaría bien.
En el santuario una veterinaria lo examinó y determinó que se trataba de un tumor y debían drenarlo.
Aunque el proceso demoró más de una hora, el peludito logró sobrevivir y sobreponerse a la situación. Cuando despertó, uno de los voluntarios estaba a su lado para tranquilizarlo y asegurarse de que no fuese a lastimarse aún más.
Durante esos días no le faltó ni amor ni atención médica a este perrito.
El can logró reponerse de la operación y en dos semanas ya había dejado el cubículo privado para compartir el área común con los otros animales del santuario. Aunque no por ello pararon las manifestaciones de amor y los cuidados para este can.
Solo que ahora su apariencia era completamente diferente.
Atrás había quedado el perrito con cara abultada del cual la gente se burlaba y comparaba con un cerdo.
Ahora el peludo lucía una carita tamaño natural y lo mejor es que está bastante sano, sus cuidadores se encargan de atenderlo y llenarlo de amor pero esperan encontrar pronto una buena familia para él.
Mira el vídeo que sus rescatistas hicieron para dar a conocer la historia de este muñeco.
Este perrito sufrió mucho a causa del rechazo y las burlas de la gente, pero solo una llamada bastó para que estos héroes entraran en acción. Por ese motivo aplaudimos a todos los buenos corazones que se unen para marcar la diferencia y luchan con el único fin de ayudar y hacer de este mundo un lugar mejor.
Gracias a tantos héroes que dedican su vida para mejorar o salvar los días de los seres más vulnerables como este peludito.