Muchas veces, las mascotas llegan a nuestra vida como si estuviesen destinadas a formar parte de nuestras familias. Es el caso de Igor Grishin, quien jamás imaginó que pasaría largos años de su vida cuidando y ayudando a una pequeña ardilla que estuvo a punto de perder su vida en el bosque.
Igor vive en la ciudad de Konchezero al oeste de Rusia.
Ahora ha pasado mucho tiempo desde aquel primer encuentro, pero la dulce ardilla y él se han vuelto inseparables. Igor vive en una zona boscosa en la que habitan todo tipo de animales.
Mientras daba un paseo, vio a una ardilla que caminaba con mucha dificultad. La pequeña se veía verdaderamente asustada y parecía aliviada cuando vio que Igor se dirigía hacia ella.
Chippy tiene una cuenta de Instagram con más de 4 mil seguidores.
Igor sabía que no se trataba de una mascota tradicional pero no podía dejar a la pequeña allí sabiendo que a duras penas podía moverse. La llamó Chippy y la llevó a casa hasta que lograra reponerse del todo.
La ardilla estaba herida así que no contaba con las fuerzas para buscar comida y mantenerse a salvo en medio del bosque. El tiempo pasó y la linda ardilla volvió a estar fuerte y saludable.
Chippy tenía una herida en su pata que le impedía caminar bien y trepar los árboles.
Sin embargo, desarrolló un nexo tan especial con Igor que se negó a separarse de él. En más de una ocasión, cuando los animales salvajes pasan un tiempo fuera de su ambiente natural se vuelve peligroso reinsertarlos en la naturaleza.
Igor realizó todas las investigaciones necesarias y decidió que se quedaría con Chippy.
Chippy tiene un hermano gatuno con el que se lleva de maravilla.
Jamás había imaginado que terminaría cuidando a un animal tan particular pero se ha esforzado al máximo para aprender todo lo necesario y darle la mejor vida posible.
Ahora, Chippy se ha convertido en toda una celebridad de Instagram. Igor publica el día a día de las aventuras de sus lindas mascotas y el mundo entero ha quedado conmovido.
“Siempre me hace reír y me distrae de las preocupaciones del día día. Estoy muy feliz de haberla encontrado”.
Este tipo de animales requieren de muchos cuidados. Cualquier persona que quiera tener un animal salvaje debe tomar en cuenta las garras afiladas, las dietas específicas y posibles estados de ánimo impredecibles.
Por suerte, en el caso de Chippy se topó con un humano muy responsable que trabaja para mantenerla saludable y feliz.
Comparte este caso para dar a conocer la peculiar vida de esta ardilla. Podía haber quedado herida y sin esperanzas en el bosque pero se encontró con quien ahora es su humano favorito.