Nuestros perritos muchas veces cometen travesuras, algunas nos causan gracia, otras nos pueden hacer molestar, cuando sus travesuras se vuelven muy seguidas y no hay manera de controlarlas puede que estemos ante un problema; la ansiedad por separación, puede estar afectando a nuestros pequeños compañeros y quizás no lo estemos afrontado de la manera adecuada.
Entonces, ¿cómo saber si mi perro sufre dicho trastorno?
En primer lugar, ¿qué es el trastorno de ansiedad por separación y que lo causa?
Según The Humane Society, son una serie de comportamientos anormales como:
– Romper objetos del hogar.
– Orinar o defecar en lugares prohibidos.
– Arañar descontroladamente puertas y ventanas.
– Dar vueltas en círculos.
– Realizar movimientos repetitivos.
– Aullar e incluso llorar cada vez que sus dueños salen de casa.
Esto se debe a que el animal piensa que puede ser abandonado.
Los perros que nunca se han quedado solos, que están acostumbrados a uno o pocos humanos, que han sufrido eventos traumáticos, vivido en refugios o cambiado de familia, aquellos a los que les modifican las rutinas o pierden a un miembro de la familia, pueden sufrir dicho trastorno.
Supongamos, que nuestro perrito hace todo lo anterior, ¿qué debo hacer?
Ahora, ¿cómo tratar la ansiedad por separación?
Primero que todo debemos ver que tan grave es el caso, The Humane Society dice que, si su mascota solo presenta los síntomas luego de encontrarse solo largas horas o en contadas ocasiones puede que deba crearle el habido de estar solo, la ayuda en principio puede ser:
– Dejar alguna prenda de vestir que usted use con frecuencia y mantenga su olor.
– No haga un alboroto al irse o llegar a casa.
– Despídase asegurando que pronto volverá, ellos pueden entender.
– Deje algún objeto que le permita entretenerse.
Es importante determinar la gravedad del caso en cada mascota
Por otra parte si nos encontramos ante un caso más extremo, donde el perro no tolera pasar pocos minutos solo y todos los síntomas están presentes, deberá:
– Comenzar un proceso de adaptación como el descrito anteriormente.
– Hacer una formación de desensibilización en la que se enseña mediante comandos y refuerzos positivos que puede permanecer en un solo lugar tranquilo durante determinada cantidad de tiempo y aun así estar feliz.
– Crear un “sitio seguro” donde él pueda moverse libremente, mirar por la ventana o puerta.
– Dejarle diversos juguetes que le permitan distraerse
– Dejarle ropa sucia que le genera la sensación de tranquilidad.
Siempre debemos recordar que se trata de un trastorno y su perro puede estar sufriendo, no lo reprendas.
Ya sabemos identificarlo y que hacer al respecto pero, ¿qué NO debemos hacer?
Si bien hay una serie de pasos a seguir, al encontrarnos ante un caso de ansiedad por separación, también hay acciones que nunca debemos tomar, de hacerlo no solucionaremos nada o peor aún podemos agravar el problema.
Lo que no funciona:
– Traer a casa otro animal, recuerda que no solo se trata de soledad, sino de estar separado de sus dueños.
– Tampoco funciona dejar encendida la radio o televisión.
– Incluirlo en un programa de adiestramiento tampoco ayudará, no se trata de desobediencia, trata de ansiedad y eso no lo puede controlar.
Actuar de la manera correcta ante, ayudará a solucionar el problema mas fácil.
Lo que nunca debemos hacer:
– Regañarlo o castigarlo, esto puede generar el efecto contrario, pues él considerará que de esa manera puede llamar su atención.
– Y jamás lo encierre o aísle, esto le causará más ansiedad e incluso puede hacerse daño a sí mismo, lo mejor es crear «espacios seguros».
Aunque todos estos datos pueden orientarnos y ayudarnos ante la presencia del trastorno de ansiedad por separación no olvidemos que lo mejor es que un veterinario observe a nuestra mascota ante la duda, ellos nos pueden dar herramientas adicionales o incluso medicación en caso de ser necesario, lo importante es el bienestar de nuestro querido compañero.
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