Luke es un hermoso león que conoció a Phuku el amor de su vida tras ser rescatado de un circo donde trabajó durante años viviendo en una celda de 1.5 metros cuadrados.
Luke y Phuku se conocieron en un santuario de Sudáfrica, y desde entonces se acompañan con tanto cariño que parece que se hubieran esperado durante todas sus vidas.
La experiencia de vida de este hermoso león no ha sido nada fácil. Desde que nació en cautiverio y fue obligado a aprender trucos para distraer al público de un circo durante sus primeros 5 años.
Afortunadamente su destino cambió cuando una fundación defensora de los derechos de los animales fue por él y convenció a sus dueños de liberarlo. Unos meses después conoció a la leona Phuku, el amor de su vida.
En Ucrania, la organización benéfica Warriors of Wildlife rescató a Luke y lo trajo de vuelta en un estado de desnutrición. En febrero de este año fue trasladado al santuario Love Lions Alive.
Phuku también nació en cautiverio, pero en un zoológico interactivo. De su especie era la más débil. Fue atacada por machos mayores por lo que fue muy cautelosa cuando conoció a Luke.
Estaba tan débil cuando llegó al santuario que no podía correr, ni saltar. Tampoco podía agarrar alimentarse correctamente con sus patas.
Line Rise y Andi Rive, quienes dirigen el santuario y cuidan a 24 grandes felinos rescatados del cautiverio aseguran que esta pareja no demoró en conocerse y quererse.
“No pensamos que alguna vez pondríamos a Phuku con otro león porque la podría lastimar, estaba muy comprometida físicamente”, dijo Andi.
Pero consideraron a Luke y pensaron que tal vez esa era la única oportunidad de Phuku. Empezaron a pasar el rato juntos y a comunicarse a través de a cerca.
Poco a poco Phuku empezó a caminar hasta llegar a correr. Luke también se estaba volviendo más fuerte.
“Phuku al principio estaba un poco a la defensiva porque previamente había estado con machos que la habían lastimado. Luke, por su parte, no tenía idea de lo que estaba pasando. Estuvimos atentos para separarlos si era necesario”, dijo Andi.
La finalidad de esta unión es que se complementen y se acompañen, esta pareja no podrá tener crías porque Phuku está esterilizada.
«Pero hemos tenido suerte con ellos. Al igual que un gato doméstico, se golpean la cabeza y se lamen. También tienen estas pequeñas peleas, pero con los leones es mucho más ruidoso. Ninguno de los dos es más dominante”, añadió Andi.
El amor es capaz de hacer milagros, y esta historia así lo demuestra, no dejes de compartirla.