Para una criatura que ha pasado tanta calamidades viviendo en la calle los lujos no son una necesidad, sólo un poco de amor y protección bastan para hacer que la vida de cualquier animalito callejero cambie para siempre.
Esta aseveración ha quedado muy bien comprendida por un joven repartidor que con su humilde empleo ha logrado transformar la vida de una perrita.
Negrita, como él mismo la ha llamado, es una perrita cacri que vivía sola en las calles hasta que el chico la rescató.
Piero es un joven repartidor de los muchos que en estos tiempos de pandemia se exponen a diario con tal de cumplir con su trabajo y llevar a casa su sustento, pero él no anda solo. Para la curiosidad y asombro de muchos, el chico entrega los pedidos en compañía de una dulce compañera Negrita.
Ella sale cada día a laborar junto a su papá y héroe humano y le gusta acompañarlo.
Lo que las personas no saben es que detrás de la emotiva escena de este repartidor y la perrita hay una gran historia de solidaridad y amor.
Piero rescató a Negrita durante un día de arduo trabajo. El chico la vio acurrucada en medio de una calle, mientras ella parecía buscar un poco de refugio del clima inclemente.
Ella lucía exhausta y hambrienta, así que el repartidor dejó por un instante su trabajo y se acercó para hacer el mayor acto de humanidad.
Piero la acarició y ella supo que su salvador había llegado, el chico decidió montarla en su moto como pudo para llevarla a su casa. Tras alimentarla y darle un buen baño, el repartidor no se quería alejar de ella.
Negrita era tímida pero a su vez juguetona y supo cómo ganarse su corazón, así que el chico quiso que se convirtiera en su fiel compañera de rutas.
Al principio el asunto era un poco incómodo, Negrita se sentía extraña viajando en la motocicleta. Por fortuna, el ingenio de Piero lo llevó a buscar el modo de viajar con su amiga de forma más segura y ahora utiliza un morral modificado para tenerla a su lado durante el trabajo.
La historia de este dúo ha conmovido no sólo a los que tienen la dicha de toparse con ellos, sino que ahora se ha hecho viral gracias a la fotografía publicada por animalista Luiggi Mar Alarcón en su Facebook.
Como era de esperarse, tras conocerse la historia los halagos y bendiciones no pararon de llover para el generoso repartidor.
“Este chico se merece una vida llena de bendiciones. Felicitaciones Piero, Dios te bendiga por adoptarla y cuidarla, es un ángel que Dios puso en tu camino”, fueron sólo algunos comentarios de las personas.
La vida triste y solitaria que Negrita llevaba cambió para siempre al ser rescatada por este sencillo joven. Aunque Piero no tuviese lujos que ofrecerle, ni le sobre el dinero, el chico decidió rescatarla y ha asumido con gran amor su misión. Ahora, él está más que dispuesto a hacerla feliz y Negrita es bastante dócil y amorosa con él.
Esta perrita encontró la vida llena de amor que merecía y su sufrimiento y soledad quedó atrás, comparte su historia y que el ejemplo de este chico recuerde a todos el verdadero sentido de la solidaridad.