Cuando una mascota abandona el hogar de manera inesperada la angustia de los dueños de la casa es la amarga compañía de cada amanecer. La esperanza de un reencuentro ilumina la vida de quienes sueñan con ese momento.
Esto fue lo que le sucedió a Rick Moneck, de West Palm Beach, Florida, quien recibió la llamada de Myra Kennett, voluntaria del refugio Bobbi and The Strays, en Long Island, Nueva York el pasado mes de septiembre, para informarle que tenían a su mascota, Relay, quien había desaparecido hace un año y medio.
El personal del refugió logró ubicar a los dueños de este pastor alemán Jack Russell Terrier, de 4 años, gracias a la información registrada en el chip.
Inicialmente Rick no creyó lo que estaba escuchando. En medio de la emoción le comentó a su padre que alguien creía haber encontrado a Relay. Definitivamente, era la llamada que hace tanto tiempo la familia había esperado recibir.
Este perro había salido de la casa por debajo de una de las vallas del patio trasero en West Palm Beach, Florida, en febrero de 2016, y hasta la fecha desconocían de su paradero.
Rick en medio de su felicidad comentó que siempre había dicho que alguien iba a encontrar a su perro. Pedía que fuera con vida, pero tenía la firme convicción que alguien lo encontraría.
Definitivamente de alguna forma tenía que pasar porque, justo cuando Relay partió para explorar nuevos lugares, estaba estrenando un collar de cuero marrón, con su nombre en latón, el nombre, la dirección y el número de teléfono de su hijo.
A partir de ese día, la familia recorrió el área para colocar los avisos que advertían sobre la desaparición de este hermoso perrito. Cuando manejaban por las calles soñaban con verlo.
Hasta que una mujer de una estación de servicio les comentó que había visto a un hombre que había llamado al perro para luego marcharse con él.
La información fue confirmada con las imágenes borrosas de un video donde apareció en hombre colocando a Relay en su coche.
Nunca se rindieron, pero con el paso el tiempo, Rick reconoció que las esperanzas fueron mermando. Fueron días muy tristes aprendiendo a vivir sin Relay, que había llegado al hogar en el 2014, siendo un cachorro.
Afortunadamente un alma generosa encontró a este encantador perro y lo llevó al refugio, quienes inmediatamente contactaron a su familia. Susanne Marin, voluntaria del refugio comentó que Relay es muy enérgico, muy alegre y divertido.
El personal del refugió se dispuso a buscar a un voluntario que se encargara de llevar a este maravilloso perrito a su hogar. Aun había mucho camino que recorrer para el soñado reencuentro.
Realmente es una historia con un final feliz, sin embargo, no todas terminan así. Muchas son las mascotas que desaparecen y nunca vuelven a su hogar, dejando un vacío muy difícil de superar.
En el caso de Relay, su familia hizo lo correcto con la identificación de su mascota Fue ese hombre quien actuó de mala fe, al llevárselo sin intentar localizar a quienes estaban ansiosos por verlo de nuevo.
Es lamentable, pero hay personas que parecen no apiadarse del dolor ajeno y se hacen indiferentes, aunque tengan en sus manos la manera como aliviar ese malestar.
Ricky y su familia expresaron su felicidad por encontrar al perro que tanto aman. Comparte esta genial historia con tus amigos y familiares.