La pandemia que ha azotado el último año a casi todos los confines del planeta nos ha obligado a permanecer confinados en nuestras casas, pero, por otro lado, nos ha brindado la oportunidad de presenciar imágenes de la naturaleza sin precedentes y de las más raras.
La ardilla blanca o albina es una ardilla común (de la familia Sciuridae) que posee una particularidad genética en su pigmentación. Tim Clifton es un fotógrafo aficionado quien ya había tenido la suerte de ver una de estos ejemplares, pero en esta oportunidad pudo fotografiarla. Sin lugar a dudas, todo un lujo.
El hombre de 54 años y oriundo de la región de East Sussex, en el Reino Unido pudo captar en su lente a una inusual ardilla blanca quien modeló para él durante un corto paseo por las inmediaciones de Alexandra Park, en Hastings, Inglaterra.
¡Vamos, vamos hasta la cima!
El animalito corría y se arrastraba por la tierra, llenando su pelaje de polvo hasta la nariz, lo que no parecía importarle en lo más mínimo, manteniéndose concentrada en llamar la atención a como diera lugar. Clifton aprovechó su suerte y no tardó en tomar al simpático dientón de más o menos el tamaño de un gato.
“Salió con la nariz sucia y parecía que tenía puesto un traje blanco, pero no se dio cuenta de que lo había estropeado. Fue muy gracioso. Las ardillas suelen ser bastante tímidas, pero él fue bastante valiente. No podía creer mi suerte. Tenía mucha confianza posando para la cámara”, dijo Clifton.
El fotógrafo quedó realmente impresionado ante la aparición del roedor, ya que es bastante inusual su avistamiento, a pesar de que existen aproximadamente 5 millones de ardillas grises en el Reino Unido, pero solo una en un millón se ve afectada por esta pérdida de pigmentación conocida como leucismo.
El leucismo (del griego leucos, que significa blanco) es una particularidad genética producida por un gen recesivo, que da un color blanco al pelaje o plumaje manteniendo los ojos su color normal y el melanismo que es su opuesto.
Indecisa en posar o no para la foto con tanta tierra encima
“No estoy seguro de si alguna vez veré a otro tan valiente. Estaba impresionado. La ardilla albina realmente se destaca y es un fenómeno bastante raro. Cuando lo vi no lo podía creer. Pensé que era genial. Me senté en un banco y él vino hacia mí. Me miró como si dijera ‘¿tienes algo para mí, señor?’”, agregó.
Ahora el aficionado a la vida salvaje cuenta con una completa colección de imágenes de ardillas grises, rojas, negras y ahora, una gran variedad de fotos de la albina. Incluso hay una en donde el animalito está parado sobre sus patas traseras, simulando tener pantalones.
Cuidar el medio ambiente es una necesidad prioritaria e inmediata ante la cantidad de problemas ambientales que amenazan nuestra calidad de vida. Además, si tienes hijos, serás su referente, por lo que aprenderán viendo lo que haces e imitándolo. Comparte con ellos estas imágenes.