Es lamentable que algunas personas se preocupen más por lucrarse que por el bienestar de su mascota. Es increíble cómo se interesen más en un beneficio propio que en la manifestación de amor a un animalito. ¡No tienen corazón!
Por un lado vemos a personas que teniendo a una mascota, con todo el derecho de vivir en libertad y sentirse amada, la mantienen encerrada por días, semanas, meses y hasta años.
Muchas de estas personas tienen la cara tan desvergonzada de afirmar que bajo esas condiciones la están cuidando porque le dan alimento, agua y le dirigen una que otra palabra. Lo qué no dicen es que su interés es comercializar con las crías de su mascota, en tres palabras… ¡Un beneficio económico! No se detienen a pensar que son seres que sienten y padecen.
Gracias a Dios también nos encontramos a personas maravillosas que no pueden ser indolentes al dolor de estos animales y sin interés alguno más que el de amar y hacerle sentir ese amor a la mascota dan todo de ellas.
Lexy, es una perrita pitbull que pasó sus primeros 8 años de vida encerrada en el patio trasero de su casa, bajo la tutela de su criador, quien solo estaba pendiente del tiempo preciso para tener la mejor camada que Lexy pudiera darle, para lograr la así la gran negociación con ellos.
Lexy, estaba carente de amor y de los cuidados adecuados para garantizar una vida feliz. Ella dio a Luz una gran cantidad de camadas de cachorros, su estomago estaba hinchado y estirado, nunca se le permitió salir de este espacio donde estaba encerrada, hasta que pudo ser rescatada.
Lexy permaneció en el refugio de Columbia Británica SPCA , donde esperó meses para que alguien la adoptara. Felizmente Jenny Mackay, fue quien aplicó para llevarse a Lexy a su casa, resulto ser su nueva madre… ¡Qué afortunadas las dos!
Jenny comenta que donde otros vieron a un perro mayor cuya raza es tildada de agresiva y peligrosa, con un vientre hinchado por su último parto, ella vio y sintió a un perro que estaba necesitado de mucho amor.
Finalmente Lexy fue llevada a su nuevo hogar, en donde se iniciaría un proceso de adaptación y sanación emocional a causa de todos los maltratos de los que había sido víctima durante sus años de vida.
Jenny sabía que tenía un largo camino que recorrer, pero también sabía que con el amor esos pasos serían de alegría, comprensión, diversión y la mayor satisfacción hacer que Lexy conociera una vida feliz.
Cuando Lexy llega al nuevo hogar estaba muy nerviosa, era muy introvertida, desconocía por completo como convivir en un hogar estable. A pesar de su timidez ella se mostró muy agradecida… ¡Sólo quería dar y recibir amor!
Tanto fue el daño emocional que recibió Lexy que tuvo que volver a aprender a ser un perro, comenta Jenny que fueron muchos los meses trabajando con un entrenador para enseñar a Lexy a caminar con una correa y algunas instrucciones básicas.
Fue tan extraño para Lexy sentirse libre que su miedo no dejaba de percibirse, fue poco a poco adaptando y abrazando esta nueva vida. Le tomó meses disfrutar las comodidades que Jenny le ofrecía, ya que su cama, la chimenea causaban en ella temor.
Jenny está feliz de los avances paulatinos pero firmes que ha logrado Lexy, actualmente una de las rutinas favoritas es sentarse en la noche de espalda a la chimenea y disfrutar el cálido ambiente.
Lexy definitivamente sabe y siente lo que es ser querida y cuidada, ama caminar por el exterior, juega de manera muy divertida.
¡Le encanta ir a la playa!
Lexy ya tiene 10 años de edad, la calidad de vida que tiene actualmente ha permitido tener salud y no muestra signos de limitaciones por la edad. Vive sus días con total disfrute, ninguno lo pasa a la ligera y así será hasta los últimos días.
Lexy y su familia son grandes defensores de los pitbulls y los perros mayores, usan su cuenta en Instagram para ayudar a difundir los mensajes de conciencia y responsabilidad hacia estos encantadores animales. Así como la importancia de amarlos.
Jenny nos comenta que no hay esperanza para la humanidad sino miramos mas allá de nosotros, debemos acudir a los necesitados ya sean de 4 o de 2 patas, no podemos etiquetar y juzgar sobre la base de nuestros temores. Todos podemos aprender mucho acerca de los perros que son rescatados.
Instagram / The Dodo
Si deseas adoptar un perrito y conocer mas sobre el proceso puedes hacer clic aquí
Excelente mensaje que Jenny nos deja a manera de reflexión, ayudemos con la difusión del mismo compartiendo esta maravillosa historia, no descansemos de aportar nuestro grano de arena ante tanta crueldad animal que existe en el mundo. ¡Déjanos saber tu comentario o tu experiencia!