Esta gatita tiene algo especial, desde el momento en el que ella y sus hermanos fueron encontrados huérfanos hace dos años, todos notaron que era algo diferente a los demás y es que en su carita tenía algo muy notable.
La nombraron Piglet apenas la vieron, notaron que era única, la gatita tenía labio leporino.
Y a pesar de padecer esta condición, su paladar era completamente funcional y esta hermosa gatita podía respirar y hacer todo como un gatito normal.
Sin embargo, quedaba mucho camino por delante, pues tanto Piglet como sus hermanos estaban muy pequeños y frágiles cuando fueron encontrados, por lo que debían alimentarlos con biberón y cuidarlos las 24 horas del día.
Poco a poco los resultados de estos cuidados fueron dando sus frutos y todos crecieron grandes y fuertes. Ahora solo necesitaban encontrar un hogar donde fueran queridos.
Una de las técnicas veterinarias del hospital en donde fue atendida esta camada vio a Piglet, desde que ella llegó cuando apenas era una diminuta gatita con los ojos aún cerrados.
Esta joven no pudo evitar enamorarse de Piglet, esta hermosa amiguita era muy dulce y especial.
Tan pronto como esta minina estuvo estable fue llevada a la casa de esta joven para vivir juntas y felices por siempre.
La condición especial de esta gatita no la puede frenar en lo absoluto, es una gatita muy dinámica y divertida, apenas entró en confianza en su nuevo hogar, empezó a correr y se divirtió mucho.
Hasta el momento Piglet ha visto a muchos veterinarios para que examinen su condición y todos han llegado a la misma conclusión: esta hermosa gatita especial no necesita someterse a cirugía, pues no la necesita en lo absoluto. Piglet puede respirar y comer como una gatita normal. Debido a esto, Piglet continuará su vida de esta manera.
Ya han pasado dos años desde que fue encontrada con sus hermanos y se encuentra en perfecto estado.
La gatita especial es muy traviesa y tiene una personalidad muy fuerte y divertida, le encanta jugar con su madre humana, es imparable.
Pero no solo es una gatita divertida, también tiene un corazón de oro. Un tiempo después, Piglet conoció a Littlefoot, un pequeño chihuahua que fue rescatado en Los Ángeles, este pequeño se encontraba muy enfermo.
Al ver a este desvalido perrito, Piglet y su enorme corazón decidieron brindarle apoyo a este pequeño, tan solo con verlo la gatita se acostó junto a él y lo abrazó, ella quería darle a él el mismo amor que recibió cuando fue rescatada.
Ella es una hermosa y noble gatita diminuta que a pesar de su pequeño tamaño y peculiar aspecto tiene mucho por dar y enseñar.
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