Si existieran ángeles de verdad en la tierra, esos serían los perros. Y cuando hablamos de peluditos de condiciones especiales, entonces podríamos referirnos sin temor a equivocarnos de que son la «santidad en patas».
Holly y Sussie son, en definitiva, una demostración de amor que manifiesta el agradecimiento por la existencia y compañía del otro. Ver cómo viven la aventura de su vida, nos da un nuevo respiro, invitándonos a descubrir el lado positivo para superar los inconvenientes que tenemos a diario.
Estas especiales criaturitas viven con Norma Miedema, una mujer holandesa, quien les abrió las puertas de su hogar y su corazón para entregarles todo el amor que merecen. La compasión no es solamente un sentimiento de los seres humanos, de hecho muchas veces los animales nos muestran un gran sentido de empatía y consideración con los demás.
Holly tiene una malformación en sus patas traseras y se moviliza gracias a una silla de ruedas que también sirve como un coche para Sussie, su amiga de cuatro patas que no puede ver ni escuchar. ¡Es algo grandioso!
Son el mejor ejemplo de amistad y abnegación
Hollie y Sussie nos invitan a reflexionar sobre cómo hemos llevado nuestra vida, y cambiar aquello que nos ha dejado atados a costumbres, pensamientos, sentimientos que nos haya privado alguna vez de poder disfrutar momentos en familia o cohibirnos de tender una mano amiga a alguna persona en su soledad.
Norma les da todo el cuidado y protección a este par de amigos y trata de hacerles la vida lo más agradable posible. Viven en Holanda, en una granja con suficiente espacio para pasear al aire libre.
Mira en acción a este dulce par que se ha robado el corazón del mundo entero:
Estos dos perritos han mostrado los tiernos momentos que pasan juntos, lo que ha llamado la atención de miles de usuarios de Facebook, que comparten su historia, sorprendidos al ver esta increíble manifestación del valor de compasión y amistad.
Holly es un perrito que tiene una discapacidad en sus patas traseras debido a un accidente pero afortunadamente puede movilizarse con su silla de ruedas y disfrutar junto a su amiga inseparable, Sussie. ¡Es una historia demasiado hermosa!
En la cesta de la parte posterior Holly puede transportar fácilmente a Sussie, sin duda, disfruta los paseos junto a su querido amigo.
¡No pueden ser más encantadores!
El bienestar propio comprende estar dispuesto a colaborar con el más noble sentimiento de compasión que les permite a estos dos bellos seres, llamados Holly y Sussie, disfrutar la vida juntos y poder alcanzar su plenitud a pesar de las limitaciones.
Vale la pena compartir este ejemplo de amor y amistad.