Desafortunadamente, muchos perritos callejeros realizan acciones extremas para intentar aliviar su sufrimiento causado por la negligencia e insensibilidad de algunas personas.
Zoe es una de esas perritas que fue rescatada de las calles en terribles condiciones, no tenía una de sus patitas delanteras. Al principio sus rescatistas pensaron que la pudo haber perdido tras recibir el impacto de un proyectil, pero al hacerle exámenes más detallados se sorprendieron con el resultado.
Zoe tiene 9 años de edad.
Descubrieron que la dulce perrita tenía partículas de hueso en su estómago, tras una inspección adicional el personal médico concluyó que Zoe se había mordido la pata para aliviar un tumor que la hacía agonizar mientras permanecía encadenada totalmente sola.
Su dueño ante la cruel escena la dejó libre sin ofrecerle ningún tipo de atención médica. Zoe por muchos pasó una vida de crueldad en manos de unas personas insensibles.
La perrita fue atendida por los rescatistas de Susquehanna SPCA.
Por suerte, sus rescatistas la encontraron a tiempo y le dieron un giro inesperado y totalmente positivo a su vida. Los veterinarios afirman que a pesar de todo el sufrimiento al que se vio inmersa la perrita fue una paciente muy dulce y juguetona.
Desde que fue intervenida quirúrgicamente para arreglar la lesión de su pata ha tenido un increíble progreso.
El tumor de Zoe era benigno, pesaba 5 kilos.
La vida de Zoe sin duda, cambió por completo y para siempre, después de la cirugía fue enviada a un refugio para animales rescatados y ahí logró enamorar a un granjero retirado de gran corazón que se comprometió a cuidarla y hacerla parte de su familia.
Aunque aún está en revisión, el hombre acordó llevarla donde sus rescatistas para que siguieran reforzando el hermoso vínculo que crearon.
La energía de Zoe sorprendió a todos sus rescatistas.
La Dra. Cristine Schneider fue quien estuvo a cargo de toda la intervención y recuperación de la adorable perrita. Destaca que debido al daño que tenía fue necesario amputar el resto de la pata delantera, sin embargo, Zoe ha demostrado adaptarse muy bien a su nueva vida con tres patitas. Al respecto Schneider destaca:
Ella es tan resistente, incluso antes de la cirugía ella se estaba moviendo, aunque con mucho dolor. Después de que se eliminó la masa, se siente como una perrita nueva. Estamos tratando de mantener la calma hasta que le quiten los puntos, pero quiere jugar y correr”.
Muchas personas hicieron posible la increíble recuperación de una perrita que logrará pasar sus años crepusculares al lado de una verdadera familia. A todos, Dios le pague. Cada gesto hace la diferencia para cambiar la vida de un perrito maltratado o en condición de calle.
Comparte esta emotivo desenlace en tus redes y celebremos juntos el asombroso milagro de una perrita que disfruta de la vida a pesar de las limitaciones que pueda tener.