La pérdida de un ser querido es una experiencia de vida muy triste y dolorosa. La nostalgia se apodera del aire que se respira para dejar un gran vacío en el alma que poco a poco se va llenando con los recuerdos de los momentos compartidos.
Lamentablemente, Mitch Byers, de 26 años, vivió hace cuatro años la muerte de su mascota Phoebe, una Jack Russell, que siempre será para este joven su inolvidable amiga.
El fallecimiento de Phoebe fue para la familia una experiencia devastadora, especialmente para Mitch. Tras su muerte en 2013, su madre decidió hacer algo en secreto para recordarla de una manera muy particular.
Envió a Phoebe a un taxidermista en Colorado para seguir manteniendo su cuerpo entre ellos.
Cuando Mitch descubrió a Phoebe disecada sobre la mesa con la mirada fija sintió una emoción muy grande.
«De inmediato supe que era obra de mi madre. Es el tipo de cosas que ella haría.”
Mitch le gusta llevar a su mascota sin vida a todas partes. Mantiene su cuenta de Instagram actualizada con las aventuras que tiene con Phoebe en cada una de las actividades que realizan juntos.
Las publicaciones de sus fotos han generado comentarios que expresan distintas tendencias. Algunos apoyan la iniciativa de la madre de este joven, así como la manera que tiene Mitch de compartir su vida con su mascota.
Sin embargo, hay quienes han manifestado su desagrado ante ese comportamiento.
Para Mitch, esta perrita es la mejor compañía en sus viajes en auto. Este joven comentó que le encanta llevar a su mascota, y cuando lo hace deja en la ventana del vehículo un letrero para evitar que los transeúntes se preocupen.
El aviso advierte que el animal no corre peligro porque está muerto.
«No te preocupes, el perro ya está muerto. Por favor, no rompas la ventana.”
Mitch expresó que ni la muerte ha impedido que su Phoebe haga nuevos amigos.
En algunas fotos se observa a Phoebe vestido para la celebración de Halloween. En otra imagen, Mitch la incorpora como un participante para ayudar con la cena de Acción de Gracias.
En uno de los videos publicados por Mitch se observa a Phoebe sentado sobre un tren de juguete, mientras pasa alrededor del árbol de Navidad, vestida con gorro y chaqueta de Santa.
Mitch reconoció que le encanta tomarse selfies junto a su entrañable amiga.
Phoebe siempre será recordada con toda su personalidad. Mitch dijo que el momento más divertido que tuvo con su mascota fue cuando la llevó a una parada de camiones en la costa de Oregón.
Cuando preguntó si podía entrar con ella, el cantinero pareció confundido, pero admitió haber escuchado historias sobre ella.
Mitch agregó que gracias a su mascota ha conocido a mucha gente amigable y ha intercambiado historias variadas.
Insta a los dueños perritos para que hagan lo mismo que hizo su madre cuando les toque vivir el lamentable momento de su partida.
Es una historia inusual, sin embargo, cada persona mantiene el recuerdo de sus seres queridos como el mayor de los tesoros, especialmente de aquellos que no nos acompañan físicamente.
Comparte con tus amigos esta manera de mantener vivo el recuerdo y déjanos saber qué piensas del proceder de esta familia para inmortalizar a la pequeña Phoebe