Hace años, Pippa, un perro de rescate de 9 años, encontró un hogar amoroso con Jan Bickhart y su familia. Actualmente vive con ellos en Virginia y es muy leal con todos los miembros de este amoroso hogar.
Este dulce perro siempre quiere lo mejor para sus seres queridos, así que cuando sintió el peligro, supo que tenía que hacer algo. Su familia la había rescatado cuando necesitaba un hogar, así que ahora era su turno de regresarles el enorme favor.
Pippa nunca imaginó que tendría una oportunidad como esta para demostrar su lealtad a su familia
A las 2 de la madrugada de un domingo por la noche, la casa de Bickhart se incendió. El fuego comenzó afuera, por lo que las alarmas contra incendio no se dispararon de inmediato. Sin embargo, Pippa pudo notar el peligro incluso antes que los sensores de humo.
Pippa comenzó a ladrar tan pronto como notó que algo andaba mal. Olió el humo afuera y decidió alertar a su familia de inmediato.
Jan notó de inmediato que no se trataba de un ladrido ordinario. Ella dijo que el ladrido de Pippa sonaba cruel, por lo que al principio creyó que había un intruso en la casa. Cuando se levantó para investigar, se dio cuenta de que la casa estaba en llamas.
La familia salió corriendo de la casa lo más rápido posible, pero Jan pronto se dio cuenta de que Pippa y su otro perro, Benny, no estaban detrás de ella.
Benny y Pippa quedaron dentro de la casa en medio de las llamas
Ella se negó a dejar a sus mascotas atrás, por lo que volvió corriendo a pesar de las advertencias de los bomberos.
Afortunadamente, los bomberos pudieron sacar a Jan, Pippa y Benny de la casa de forma segura. Gracias a la valentía de Pippa y sus increíbles habilidades de detección, toda su familia estaba a salvo del fuego.
La casa de Jan fue devorada por el fuego casi por completo
La causa del incendio de esta casa fue algo bastante común, especialmente durante las fiestas. El fuego comenzó debido a los cables conectados a las luces navideñas de la familia. Habían usado un cable inadecuado en el exterior de la casa.
Esta no era la primera vez que Pippa tenía un encuentro cercano con un incendio. Hace aproximadamente un año, la casa de su vecino también se quemó por culpa de algunas luces de Navidad defectuosas.
Esto nos demuestra un par de cosas: hay que ser muy cuidadoso durante las fiestas con el uso de las luces decorativas y que no podemos subestimar la inteligencia y la bondad de una mascota.
Puede que la familia de Jan haya pasado por momentos difíciles al perder buena parte de su casa, pero al menos todos sobrevivieron para contarlo gracias a Pippa.
Por suerte para Jan y su familia, Pippa es una perrita leal, inteligente y valerosa
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