Cuando salimos de paseo nunca sabemos con qué nos podemos encontrar, es posible que nunca pensemos en terminar el día siendo unos verdaderos héroes.
Algo que le pasó a Austin Russell, quien se dirigía a realizar su paseo anual en bicicleta para celebrar Año Nuevo y terminó por rescatar a un indefenso perrito que chapoteaba insistentemente en el agua.
El incidente ocurrió en Gran River, Michigan.
Russell vio a lo lejos al perrito ahogándose y sin dudarlo se detuvo para ayudarlo, parecía que había quedado enredado entre algunas ramas, en medio de su desesperación el indefenso perrito veía alrededor e intentaba ladrar.
Había quedado atrapado cerca de un campo universitario así que rápidamente se dirigió al guardia de seguridad.
Es una mezcla de pitbull y husky.
Cuando regresaron notaron que el perrito se había librado de las ramas pero seguía luchando en medio del agua congelada, tras unos minutos de incansable lucha el perrito logró nadar pero se topó con una gran pared que le impedía salir.
El guardia de seguridad lo intentaba sacar con un trapeador pero los intentos fallaron, ya el perrito lucía cansado por lo que actuaron rápidamente.
El perrito tiene por nombre Max.
Russell buscó una salida alternativa, notó que debajo de las vías del tren que pasaba cerca del campo había una entrada que le permitiría alcanzar al perrito mientras nadaba siguiendo el auge del río. Al respecto el joven comenta:
Me acosté sobre mi estómago y el nivel del río fue perfecto. Mi brazo apenas era lo suficientemente largo para alcanzar al perro. No tenía collar, así que lo agarré por la piel del cuello y lo saqué del agua”.
El perrito no dejaba de temblar, había estado mucho tiempo en el agua congelada, por suerte, pudo aguantar y ser rescatado. Fue trasladado al Refugio de Animales del Condado de Kent.
El refugio se contactó con sus dueños quienes alegaron que Max se había escapado del patio trasero de la casa que había sido derribado.
Se desconoce la razón por la que el perrito terminó en el río.
Sus dueños están infinitamente agradecidos de que hayan rescatado a su mascota. Han pensado darlo en adopción por lo que Russell está muy interesado en ofrecerle un nuevo hogar.
Por destino o casualidad es posible que Russel y Max pasen el resto de sus vidas juntos. Por ahora, celebremos este gran rescate con final feliz que les robó una sonrisa a todos los amantes de los animales.
Hay que aplaudir la hazaña de este valiente hombre que sabe valorar y amar la vida de los animales. Ojalá que permanezca por siempre junto a este noble perro.