Las historias de mascotas están repletas de felices coincidencias y animales que eligen a sus dueños antes que ellos sepan que fueron elegidos. Esta es una de esas historias. Una mañana dos perras aparecieron de la nada en la granja de Estados Unidos y decidieron quedarse para siempre.
La mujer dueña de la casa vio a las perras merodeando las ahuyentó, pero horas más tarde volvieron, lo que hizo que empezara a cambiar de opinión.
Les ofreció agua y viendo lo flacas que estaban, decidió darles algo de comer. Las perras estaban más que hambrientas y devoraron todo lo que había en el bowl.
Esta es la primera foto de las dos después de comer por primera vez en la granja.
Para ese entonces ya había comprobado que las perras estaban abandonadas y tras comer, las perras comenzaron a agradecer a la dueña de la granja.
Hacía varias semanas que la mujer había pensando en adoptar un perro, pero no lo había hecho por temor a que el animal se sintiera solo, ahora, con estas dos preciosuras, parecía tener todo resuelto.
Las perritas se acostumbraron a la granja sin ningún problema.
Sin embargo, consultó durante varios días a los vecinos, pensando que quizás se habían perdido, pero no encontró a los dueños. Finalmente las llevó al veterinario para ver si tenían el microchip y así poder averiguar el origen de las perras, pero no tenían ninguno.
Entonces decidió colocarles el microchip… pero con su dirección y nombre.
¡Finalmente tenían la dueña que habían elegido!
Decidió llamarlas Thelma y Louise, y comenzaron una sana dieta que les ayudó a recobrar su peso y estar en excelente estado de salud.
Las perritas comparten el día con los caballos y los otros animales de la granja.
Louise no puede dejar de reflejar en su cara la felicidad de haber encontrado un hogar.
¡Disfrutan de su nueva vida y de muchos baños de sol!
Además no dejan de jugar entre ellas
Ambas se comportan como verdaderas hermanas, cuidándose y queriéndose mucho.
Las perras hoy viven felices en la granja, cuidando la propiedad y a su dueña, pero, especialmente, dándole el cariño que tanto se merece. ¡Además, todas sus andanzas están en un perfil de Instragram!
Thelma adora jugar con su dueña y es muy feliz en la granja.
Ellas sabían que allí estaba su nuevo hogar antes de ser adoptadas definitivamente. ¡Es increíble!
Comparte esta tierna historia que demuestra una vez más que los animales son los que eligen a sus dueños.