Justo cuando pensamos que lo hemos visto todo y que nada puede sorprendernos, salen a la luz sucesos inimaginables que nos hacen perder la esperanza en la humanidad, que es capaz de cometer los peores actos de injusticia contra seres inocentes, imposibilitados para defenderse por sí mismos.
Muchos animales siguen sufriendo
Tristemente, esto fue lo que vivió una inocente perrita husky que padeció los peores tratos a manos de su humano, a quien entregó su amor y amistad incondicional. Su nombre es Blossom y seguramente tardará mucho tiempo en olvidar la amarga experiencia por la que pasó.
La indefensa perrita de cinco años de edad, fue mantenida dentro de una jaula al aire libre, expuesta a las inclemencias del clima, en una casa del Condado de Scioto, en Ohio, Estados Unidos.
Cuando las autoridades de la Oficina del Sheriff del Condado de Scioto fueron notificados sobre esta gran barbarie, inmediatamente arribaron a la casa en cuestión, acompañados de la rescatista Chrystal Brown, del refugio de animales Sierra’s Haven.
Al llegar, se encontraron con una terrible escena: la perrita era prácticamente un saco de huesos y la jaula estaba atascada de lodo, por lo que fue muy difícil poder liberarla.
Necesitaba ayuda urgente
“Tuvimos que tirar una y otra vez de la jaula. Nos llevó al menos cinco minutos sacarla del lodo.
Ella también empujaba la jaula con sus patitas, sabía que estábamos tratando de ayudarla”, dijo Chrystal.
Una vez fuera de la jaula, Blossom fue trasladada a un hospital veterinario de emergencia, para ser revisada minuciosamente.
Se le realizaron rayos X y eso comprobó lo mal que lo había pasado, había ingerido rocas, envoltorios de plástico y otros objetos extraños, debido a la inanición de la que fue objeto.
Tal descubrimiento rompió el corazón de los oficiales de policía y de la rescatista, ya que no entendían cómo alguien podía ser tan malo para negarle alimento y agua a un ser vivo tan dulce.
“Estaba a cinco pasos de su puerta para darle comida. Ni siquiera se dignó a alimentarla”, comentó muy molesta Chrystal.
Blossom debería tener un peso de al menos 27 kilogramos, pero solo pesaba 17 cuando fue rescatada, su estado de desnutrición era extremo.
Por eso, el personal del hospital de animales continuará alimentándola con pequeñas comidas hasta que pueda digerir sus alimentos de forma segura, y pueda recuperar peso.
Una vez que esta perrita esté completamente recuperada, será puesta en adopción, aunque su dueño podría estar muy cerca de ella: uno de los oficiales que lleva su caso ha quedado conmovido con todo lo que ha pasado y ha mostrado interés en adoptarla.
Confiamos en que Blossom se recupere muy pronto y que se haga justicia para ella, para que ningún animalito más vuelva a pasar por algo tan lamentable.
Comparte este impactante caso con todos tus amigos y alcemos la voz para defender a los animales.