Valcor es el nombre de una bella, cariñosa y tierna pitbull de color blanco de solo tres años de edad que recibió el peor de todos los regalos el día de Acción de Gracias y es que fue abandonada por su dueño en el refugio Animal Friends of the Valleys (AFV) ubicado en Wildomar, California.
Valcor no es una pitbull cualquiera, esta linda perrita sufre sordera de nacimiento, pero eso no le impide ser cariñosa con sus rescatistas, quienes quedan cautivados por sus brillantes y hermosos ojos azules y su gran encanto de dar besos para demostrar su gratitud.
Debido a su condición, la bella perrita desarrolló un gran interés por las cosas suaves y, más aún, una gran pasión por las mantas entre las cuales se siente resguardada y cómoda apilándolas para poder envolverse en ellas.
Al llegar al refugio y verse abandonada, lejos de lo que alguna vez fue su casa, las mantas se convirtieron en su mayor resguardo
Publiée par Debbie Munson sur Mercredi 6 septembre 2017
“Necesita mantas en todo momento para que pueda sentirse cómoda en ellas”, dijo su antiguo dueño al momento de entregarla al refugio.
De inmediato los encargados del refugio la llenaron de mantas para que pudiera estar cómoda como en casa
“Se envuelve a sí misma y duerme como un bebé hasta que alguien la toca o decide que es tiempo de jugar un poco”, comentó el encargado del “AFV”.
Valcor fue entregada al refugio después de que su familia principal tuviera un hijo
“Se había convertido en la protectora de su nuevo hermanito menor y se puso bastante territorial dentro de la propia casa”.
La actitud de la perrita representaba una amenaza a los visitantes e incluso a los mismos habitantes de la casa. Así que determinados a rehabilitar a la perrita y conseguirle un nuevo hogar, los encargados del refugio realizaron distintas pruebas con supervisión profesional.
Primero dejaron que se le fueran acercando distintos perros para que fuera interactuando con ellos uno a uno; después de eso permitieron que fuera aumentando el número de caninos en la sala para hacerle compañía a la dulce Valcor. Los resultados fueron increíbles y la perrita demostró que sí podía interactuar amistosamente con ellos:
“Hace ruidos raros que los otros perros no entienden, pero eso es normal en los animales sordos”, dijo Katie Menges, encargada principal del refugio.
Como segundo experimento permitieron que Valcor pudiera socializar con niños, y encontraron que su relación con los pequeños es increíblemente satisfactoria y la hacía mejorar de humor.
Los rescatistas fueron bastante cuidadosos con estas medidas de protección al principio, pero al realizar las pruebas y ver que Valcor es una perrita con corazón noble y muy amorosa, pudieron bajar un poco las medidas de supervisión.
Estas pruebas permitieron que Valcor recibiera a la semana una visita muy especial de un grupo de estudiantes de la escuela primaria que interactúan con los caninos.
“Se ilumina por completo cuando los niños están alrededor y le encanta besarlos”, señaló Mengues.
Valcor pasó todas las pruebas de comportamiento y ha sido adoptada por una dulce mujer que se ha comprometido a cuidarla y entenderla por sobre todas las cosas por el resto de su vida.
¡Comparte esta emotiva historia con todos tus amigos y no olvides que los perritos tienen un gran corazón sin importar su condición física, ámalos respétalos y cuídalos!