A pesar de la nobleza y el enorme amor que los perros nos brindan día a día, cada vez son más los casos de abandono y negligencia que tienen lugar en todo el mundo. El caso de una perrita llamada River en Nueva York ha causado conmoción tras ser una muestra más de las terribles condiciones en las que alguien puede abandonar a un perro.
La perrita fue hallada en el poblado de Roma, en la zona central del estado de Nueva York.
Una persona se encontraba pasando por el canal Erie cuando se dio cuenta de que una perrita de color blanco había sido abandonada allí. Pero eso no era lo peor, no sólo la habían llevado hasta un lugar sumamente peligroso para su salud, sino que la ataron intencionalmente a un tronco, de manera que no podría escapar de allí de ningún modo.
“Si no la hubiesen rescatado después del fin de semana, probablemente se habría ahogado”.
Al tratarse de un canal en donde el nivel del agua puede aumentar en cualquier momento, era un verdadero milagro que lograran encontrarla con vida. Era cosa de segundos que finalmente muriera ahogada. El testigo llamó de inmediato a Control de Animales y desde allí enviaron a alguien a rescatar al asustado animal.
“Estaba parcialmente sumergida en el agua. Se sostenía al tronco con sus patas delanteras y levantaba su cabeza en busca de ayuda”.
Por suerte, River consiguió la ayuda que tanto necesitaba; y para sorpresa de muchos no tardó en demostrar que se trataba de una perrita sumamente dulce y feliz. Es inimaginable pensar que alguien quisiera abandonar a una perrita tan amorosa.
En el refugio aseguran que River tiene mucha energía y le encanta salir a explorar.
El fatal abandono al que fue sometida merecía que se tomaran acciones, así que decidieron realizar investigaciones para lograr dar con el dueño. La perrita no tenía ningún microchip ni información en su collar, pero las autoridades publicaron su fotografía en las noticias locales pidiendo cualquier información que lograra dar con los culpables de su terrible abandono.
Los veterinarios estiman que River tiene poco más de un año.
Pasados los días lograron dar con el paradero del dueño gracias a los datos de varios informantes. Ahora se encuentra bajo custodia policial y a la espera de un juicio. Las investigaciones revelaron que el dueño ya no quería tener a la perrita, así que le pagó a otro hombre para que se deshiciera de ella.
“Él ya no quería a la perrita, pero no la llevó a ninguno de los dos refugios que hay en la zona. Decidió dejarla atada”.
Ahora la dulce River se encuentra buscando su hogar definitivo, y con lo amorosa y simpática que es no cabe duda que logrará vivir en una familia donde sí le den el cariño que tanto se merece.
Te invitamos a compartir esta nota para celebrar que se tomaron acciones en contra de los culpables de este vil abandono.