No hay mejor decisión que permitir que nuestros niños crezcan acompañados del amor de una mascota. Los perros son sin duda esos amigos incondicionales que nuestros hijos tendrán de por vida.
Una vez más, unos fieles peludos se han convertido en los protagonistas y héroes salvadores de su humano favorito, un pequeño niño de 3 años diagnosticado con autismo.
Los padres de Marshal Butler, que viven en la localidad de Ponce de León, Florida (Estados Unidos), atravesaron la peor de las pesadillas, el pasado miércoles 3 de junio. Sin que nadie de la familia pudiera darse cuenta, su pequeño, que no es capaz de comunicarse con las personas, desapareció del hogar.
Marshal fue visto por última vez usando un pañal e inexplicablemente desapareció junto a sus perros
Sus compañeros caninos: Nala y Buckwheat, tampoco aparecían por ningún lado, por lo que todos entraron en pánico.
Después de una hora de desesperada búsqueda por los alrededores con la ayuda de los vecinos, los padres de Marshal llamaron a la Policía. Los oficiales acudieron de inmediato a la escena, incluso con perros K9 para rastrear al menor.
Miembros de la familia, el vecindario entero, la Policía local y nacional, así como los oficiales de la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida, se pusieron de cabeza durante varias horas tratando de dar con el paradero de Marshal.
Se difundió la noticia masivamente en las redes junto a imágenes del niño y los perros, con la esperanza de que alguien los viera.
«Estábamos en pánico. Todo tipo de peores escenarios se nos estaban pasando por la cabeza. Durante todo el proceso, estás aterrorizado», dijo Kayla Stewart, tía de Marshal.
Afortunadamente, unas horas después, una vecina, Carol Shelton, reconoció a Marshal. Nala y Buckwheat estaban firmes junto al niño, protegiéndolo a toda costa.
«Sus dos perros estaban allí con él. Los cachorros lo habían guiado. Supongo que lo mantuvieron a salvo librándolo de cualquier peligro», dijo la vecina.
Marshal fue hallado ileso y flanqueado por los perros de la familia, muy cerca de la orilla de un río, a 2 km de su hogar.
Un lugar realmente peligroso que lo hubiera llevado a un trágico final si no hubiera sido por la compañía de sus perros.
Nala y Buckwheat cuidaron de Marshal perfectamente hasta que fuera encontrado y lo hubieran hecho por horas y días…
El pequeño seguía con nada más que un pañal. No ha quedado claro qué estuvo haciendo el niño durante todo ese tiempo, cómo escapó y por qué sus padres lo perdieron de vista. Pero lo verdaderamente importante es que fue hallado sano y salvo gracias a sus amigos incondicionales.
Ni el pequeño ni los perros tenían lesiones físicas. Sin embargo, Marshal estaba repleto de barro por jugar en la tierra, pero su familia no estaba sorprendida. Aparentemente, jugar en la tierra es su actividad favorita.
La madre de Marshal, por su parte, no podía parar de agradecer a sus perros:
«Ellos estaban haciendo su trabajo, estoy tan agradecida por eso. Ambos aman mucho a Marshal, así que sabían lo que tenían que hacer».
Este increíble suceso muestra cuán amorosos e incondicionales pueden ser nuestros amigos peludos, especialmente con los niños. Lo que pudo ser una tragedia acabó en final feliz, solamente gracias a ellos. ¡Realmente no los merecemos! ¡Comparte esta noticia!