Los últimos meses del año están caracterizados por las muchas fiestas que se celebran, y la cantidad de festejos implican el consumo de muchas cosas como vestimenta, regalos, adornos, y sobre todo, comida. Alrededor del mundo hay diferentes formas de celebrar las fiestas, depende de la cultura, la religión y las costumbres locales.
En los Estados Unidos, suelen consumir un animal en particular en su cena de Acción de Gracias y son los pavos, cientos de miles de pavos son sacrificados en esas fechas para luego ser comercializados como carne de consumo, pero muchos de estos animalitos corren con la suerte de ser ‘indultados’ y otros simplemente logran captar la compasión y ser rescatados de su muerte segura.
Uno de estos afortunados pavos se llama Antoinette, y tres días antes de Acción de Gracias del 2016, se encontraba con cientos de aves y conejos en un mercado de la ciudad de Nueva York, pero varios socorristas que paseaban por el lugar notaron que ella no sobreviviría por mucho tiempo y se pusieron a trabajar para salvarla.
Antoinette era tan solo una bebé en esas fechas y estaba bastante afectada por la aglomeración de todos los animales en el lugar. Los socorristas la llevaron a un consultorio médico de la Granja Santuario de Woodstock, a solo un par de horas de Nueva York, allí el personal atendió a la pavita las 24 horas del día.
“Cuando la encontraron por primera vez, estaba un poco deshidratada y necesitaba una dieta especial, ya que los pavos se crían para crecer en un corto período de tiempo”, dijo la gerente de comunicaciones del santuario animal, Ashley Nester.
Nester cuenta que anteriormente la granja no había tenido el privilegio de compartir con pavos y después de la recuperación de Antoinette, notaron que esos animalitos pueden ser muy amistosos y extrovertidos. Antoinette logró robarse el corazón de todos los que hacen vida en la granja, tanto a humanos como a animales.
“¡Antoinette definitivamente se ha vuelto más amistosa y afectuosa desde que fue rescatada y le encanta la atención!”, dice Nester. “Cuando llegó por primera vez siendo bebé, nuestros cuidadores la vigilaban de cerca, pero también Sergio, el gallo, que le mostró las reglas a seguir del santuario”.
Tan solo un año después, Antoinette está totalmente cambiada, dejó de ser la pequeña pava pero sigue amando los cariños y los paseos y juegos con sus amigos.
De hecho, en la página oficial de la red social del Santuario Animal de Woodstock, suelen publicar vídeos de las aventuras de Antoinette y sus amigos, pero hay uno en particular que ha captado la atención de todos y es lo mucho que le gustan los abrazos.
En los vídeos se puede ver a Antoinette muy cariñosa y amable, los visitantes de la granja quedan impresionados de que sea tan alegre y tan amistosa, muchos la comparan con los perros que suelen dar ese amor con su hocico, pero Antoinette lo hace con su pico.
En el Santuario Animal de Woodstock conviven muchos animales y pueden necesitar tu ayuda, así que te invitamos a visitar su página y dejes tu donación, incluso pueden patrocinar un pavo u otro de los animales de la granja, ¡es maravilloso!
Aquí tienes el tierno vídeo de Antoinette, siendo abrazada y mimada. ¡Quien diría que un pavo puede ser así de tierno!
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