Dicen que las mascotas y los niños es la combinación perfecta para tener una familia feliz. Sin embargo, esta teoría no parecen convencer a todos y algunos actúan de manera errónea solo por no saber organizarse en casa. Smiley es un adorable perrito que tuvo una vida llena de comodidades sin que le faltara nada, pero un día todo cambió para él cuando sus dueños se enteraron que esperarían un bebé.
Sus dueños sin pensarlo lo llevaron al refugio más cercano donde sería sacrificado.
Sin entender por qué las personas que más amaban lo habían abandonado, el perrito tuvo que pasar una situación poco alentadora. Cuando creía que era el fin fue salvado justo a tiempo por una familia que le brindó la oportunidad de vivir, cambiando una vez más el rumbo de su vida. Su nueva dueña vio la fotografía de Smiley en Facebook y se conmovió con la mirada triste de un pequeño pitbull que necesitaba amor.
Olena Kagui adoptó al perrito en un refugio en Brooklyn, Nueva York.
Kagui vio algo en el perrito que se robó su atención. Quizá intuía que se trataba de un perrito que en algún momento tuvo una vida feliz que le encantaba jugar con sus ruidosos juguetes y por decisiones pocos comprensibles fue abandonado. En el refugio nadie comprendía por qué sus dueños lo abandonaron solo porque su dueña estaba embarazada.
Una razón poco lógica para abandonar una mascota que fue tratado como un miembro de familia.
El esposo de Kagui no estaba muy convencido de adoptar una mascota, pero las lágrimas de Olena al ver en los comentarios que nadie podía llevase el perrito a casa lo hizo cambiar de decisión. Hablaron con Pound Hounds Res-Q y ellos le informaron que al perrito solo le faltaba un hogar de acogida, así que Olena y su esposo se lo llevaron a casa, el perrito tendría que adaptarse a su nuevo hogar.
Smiley no hacia contacto visual con sus nuevos dueños ni obedecía ninguna orden.
A pesar de lo difícil que fueron los primeros días la pareja supo de inmediato que el perrito había sido muy bien educado ya que no saltaba en las camas ni mordía nada que no fueran sus juguetes. Con el paso del tiempo el adorable perrito fue revelando su verdadera personalidad dejando ver una mascota muy amorosa.
Smiley empezó a dormir como un bebé y le encantaba mover su cola en forma de agradecimiento.
Solo fue cuestión de tiempo para que el adorable perrito se sintiera cómodo y se adoptara a su nueva familia. Para que Smiley y sus dueños disfrutaran de los paseos el grupo de rescate sugirió a Olena sacarlo con un arnés de pinza frontal, de esta manera las caminatas serías más cómodas y sencillas para todos.
Disfrutaba jugar con otros perros y estar rodeado de personas.
A pesar que Olena y su familia le están brindando un hogar de acogida, el perrito se ha robado sus corazones y ya es parte de la familia. Donna Dareel, fundadora y presidenta de Pound Hounds estaba incrédula cuando le comentaron la historia de Smiley, al respecto comenta:
«Pensar que lo iban a sacrificar porque su familia estaba teniendo un bebé es algo loco”.
Aunque para los antiguos dueños del perrito la llegada de un bebé sea una razón para abandonar una mascota, nada justifica que lo hayan dejado en el refugio, ni muchos menos abandonarlo para que fuera sacrificarlo.
La vida de cualquier animalito es tan valiosa como la de una persona, afortunadamente Smiley tuvo un destino muy diferente y ahora tiene una vida llena de alegría y amor incondicional.
Si amas a los animalitos no dudes en compartir la nota para llegar a los corazones de miles de personas y motivarlos a adoptar a perritos como Smiley que fueron injustamente abandonados.