Para Stefanie y Duane Lindsay, una pareja de El Dorado, California, un día de aventura y playa con su perrita de tres años Roo, se transformó en uno de angustia y desesperación tras sufrir un accidente automovilístico de regreso a casa.
La pareja regresaba a su hogar después de haber pasado el día en Bodega Bay, todo transcurría con normalidad cuando de repente fueron impactados por otro conductor que conducía a más de 100 kilómetros por hora.
Pareja se encuentra con su perrita después de haber sido expulsada de la ventana del auto en un accidente.
El auto de la pareja se salió de la carretera, se volcó en un campo de hierba, finalmente aterrizó de manera vertical.
Se revisaron uno al otro, tenían heridas leves, pero lo que realmente los conmocionó fue notar que su perrita no estaba en el asiento trasero.
“Tan pronto como aterrizamos, nos preguntamos ´¿Estás bien?´ Y luego Duane se dio vuelta menos de dos segundos después y simplemente dijo: ´Roo, Roo´. Se dio cuenta que no estaba en el asiento trasero”, dijo Stefanie.
La ventana trasera había volado y pensaron lo peor, después de ser arrojada por la ventana la pareja pensó que su amada bola de pelos había muerto. Al respecto Stefanie comentó:
“Estaba segura de que estaba muerta. Ella fue expulsada, estábamos seguros de que no había forma de que pudiera haber sobrevivido”.
Duane estaba sangrando por la cabeza, pero aun así, gateó para buscar a Roo. Stefanie llamó al 911, mientras llegaba la ayuda, Duane seguía buscando a la perrita pero todo fue en vano.
Una vez que llegaron los paramédicos, Duane fue trasportado al hospital, era necesario que recibiera atención médica urgente. Los bomberos y la policía escanearon el área con sensores térmicos pero no encontraron nada.
En el hospital, descubrieron que Duane tenía un corte en la parte posterior de la cabeza y fractura de esternón. Stefanie no sufrió graves lesiones por lo que no fue ingresada al hospital.
Con la esperanza de encontrar a su perrita, la mujer regresó al lugar de los hechos para buscarla, lamentablemente, no había ningún indicio de su paradero.
Al día siguiente acudió a las redes pidiendo ayuda para encontrar a su perrita. Increíblemente, muchas personas reaccionaron a la publicación, amigos, familiares y personas de la comunidad fueron de gran ayuda para dar con Roo.
“La comunidad, a la que no pertenecemos, con la que no teníamos ninguna relación, realmente se unió para ayudarnos a encontrar a nuestro perro”, dijo Stefanie.
Afortunadamente, las horas de incertidumbre acabaron luego que la pareja viera un aviso de alguien que publicó en Facebook que había una perrita desorientada a 4 kilómetros del lugar del accidente. La perrita estaba sentada debajo de un árbol en un callejón sin salida.
“Caí de rodillas en medio del callejón sin salida, llorando por ella. Le tomó un par de segundos darse cuenta de quién era yo, pero una vez que lo hizo, simplemente vino corriendo hacia mí”, comentó Stefanie.
Roo sufrió daños en los tejidos blandos y traumatismo, también tenía un poco de erupción en su piel debido al impacto que sufrió en la carretera. Tomando en cuenta que salió disparada de un auto en movimiento, sus padres agradecen que no haya sufrido secuelas permanentes.
Mira el emotivo reencuentro a continuación:
Para esta pareja Roo no es una mascota, sino un miembro más de la familia, por lo que están infinitamente feliz y agradecidos de tener de vuelta. Finalmente Stefanie comentó:
“Es difícil imaginar cómo sería la vida sin ella. Afortunadamente, no tenemos que pensar en eso durante mucho tiempo”.
Tras el accidente esta pareja tomará mayores medias a la hora de viajar con su perrita, por lo que espera que su historia motive a otras personas a comprarles a sus peludos un cinturón de seguridad con arnés.
Nos alegra saber que esta adorable bola de pelos está sana y salve. Deseamos siga disfrutando de una larga vida al lado de quienes la aman tanto.