Saber de la desaparición de un ser querido es un sentimiento devastador, la angustia y los nervios invaden el cuerpo ante la posibilidad de que algo realmente malo les haya pasado. Todo esto es exactamente lo que vivió una familia en Morbihan, Francia, después de que su amado hijo canino haya desaparecido misteriosamente.
Su nombre es Perseo y sus padres humanos lo consideran como un hijo.
Perseo vive en la comunidad de Theix y sus dueños lo describen como un cachorro extremadamente amigable, quizás esa haya sido su debilidad.
El bull terrier de Staffordshire tiene dos años y desde siempre ha vivido con su única familia, sus humanos no conciben la vida sin él y han recurrido a las redes sociales para suplicar ayuda.
Con este tipo de volante habían buscado a Perseo.
La cara del peludo color negro con una manchita blanca en su cuello ha estado en diferentes grupos de Facebook y cadenas de Whatsapp desde el 19 de febrero, día en que desapareció.
El último día en que fue visto Perseo había salido a dar un paseo por la zona, ya que es una comunidad bastante pequeña todos se conocen y el perro sabía ubicarse muy bien por el pueblo. Por esa razón Maycon Lima y Queuma Dos Santos, dueños del animal, encendieron la alarma cuando notaron que el tiempo pasaba y la criatura no volvía a casa.
Algo le había pasado a la criatura.
Al aumentar la angustia los esposos decidieron ir a buscar a su hijo canino.
“Lo buscamos por todas partes. Conoce bien el pueblo, es muy sociable y gentil. Ama a los niños. Dormía con nosotros y tenía miedo de los ruidos fuertes. Lo teníamos desde bebé, estamos realmente desesperados”, explicaron Maycon y Queuma en el momento de la desaparición.
La pérdida de Perseo conmocionó tanto a sus humanos que no sólo acudieron a los oficiales para solicitar ayuda, sino que ofrecieron una cuantiosa recompensa de 2.000 euros a quien ayudara al peludo a volver a casa.
Desde ese momento, la pareja obtuvo una pista importante. Un testigo les aseguró haber visto a unas personas llamar al perrito desde un automóvil y llevárselo.
Maycon y Queuma sospecharon que alguien lo había robado.
El anzuelo sobre la recompensa funcionó, una mujer llamó para informar que el perro había sido visto en manos de una pareja y ofreció información sobre el paradero de Perseo.
“Nos dijeron que vieron una pareja con un perro que coincidía mucho con el nuestro. Nos dieron fotos y no cabía duda de que era él. A partir de ahí, no nos soltamos para poder obtener más información“, comentó la pareja.
La “buena samaritana” que hizo la llamada se ofreció a colaborar con el reencuentro pero exigió la recompensa. Queuman sospechaba que estaba tratando realmente con la gente que se había robado a Perseo e hizo su propia investigación.
La mujer de la llamada argumentó que “la pareja” ficticia le había dejado al animalito para que lo cuidara. En ese momento Queuman pidió que llevara a Perseo al veterinario y acordaron verse en el lugar.
Pese a mostrarse primeramente renuente la informante aceptó.
Maycon y Queuma la interceptaron en el lugar y no dejarían que se les escapara sin que ellos tuviesen de vuelta a Perseo.
“En ese momento, vi que quería que le diéramos la recompensa de 2.000 €, pero eso estaba fuera de discusión […] Teníamos miedo de que la chantajeara, pero mantuvimos la calma para jugar su juego”, relató la dueña.
Después de todo el calvario que debieron atravesar, Perseo ha vuelto a casa sin que sus papitos debieran pagar nada a sus captores que se lo habían llevado a más de 700 km de su familia. Sin duda que la determinación de estos dueños fue fundamental para que la historia tuviese un final feliz y no les dieron el gusto a los delincuentes.
Este caso puede ser más común de lo que creemos, el robo de mascotas es un crimen que se ha agudizado durante la pandemia. Comparte esta noticia y coméntales a tus amigos sobre el astuto rescate.