Es increíble cómo día a día seguimos encontrando casos de abusos y crueldad animal que simplemente nos dejan con la boca abierta. En esta oportunidad tenemos a un oso que a lo largo de 8 años solo ha conocido el temor y el confinamiento. Pero que gracias a un grupo de increíbles personas, ha logrado quedar en libertad y tocar por primera vez en su vida el pasto verde y oler las hermosas flores que forman parte de su medio natural.
Los únicos momentos en los que “Kivtka” estaba fuera de su jaula en la Estación de Caza de Terebovlya, en Ucrania, era cuando era usada como carnada para entrenar a los perros de caza, una práctica que es condenada por diversas organizaciones en el mundo.
La organización Four Paws negoció por meses con el dueño de Kivtka para liberarla. Además obtuvieron imágenes realmente crudas sobre la horrible práctica a la cual se someten a estos animales salvajes, que merecen estar en su medio natural y no confinados a vivir en una jaula.
Los osos como Kivtka, débiles por la falta de alimento, eran encadenados a postes donde debían soportar los ataques de los perros, quienes debían “aprender el arte de la caza”. En ocasiones, a los osos se les era removido sus garras y colmillos para que los perros no enfrentaran ninguna clase de peligro al ir contra el animal salvaje.
Carsten Hertwig, una experta en osos que forma parte de la organización internacional que logró la liberación de la osa, explicó cómo los animales debían soportar ser rodeados por perros y atacados por ellos. Comentó también que en esas condiciones, los osos apenas y podían defenderse ellos mismos. La organización ha estado luchando a lo largo de 4 años para conseguir la prohibición total de esta horrorosa práctica.
Aunque la utilización de osos para esta práctica está prohibida desde el año 2015, aún es legal que alguien sea dueño de un oso. Algo por lo que la organización está luchando en que el gobierno cambie la legislación en esa materia, y así impedir que otros animales como la osa sean sometidos a estos abusos.
Para Hertwig, ver cómo los dientes de Kivtka estaban desgastados y cómo sus encías estaban hinchadas debido a que prensaba con su mordida los barrotes de la jaula, es algo que simplemente puede describirse como tortura. Pero el 27 de Junio, Kivtka dejó esa jaula para siempre.
Después de llegar a un acuerdo, rescatistas de la organización arribaron a la estación de caza para llevarse a la osa y trasladarla a un santuario de osos en Domazhyr. Al llegar y después de realizarle estudios, tuvieron que someterla a una cirugía debido a que uno de sus dientes se había fracturado. Le tomó solo unos pocos días para recuperarse completamente.
“Se veía tan sorprendida de pisar pasto verde por primera vez”, comentó Hertwig.
Su sufrimiento al fin había terminado, Kivtka ahora es libre en un ambiente seguro donde será cuidada, disfrutando del medio natural y con sus nuevos compañeros, otros osos que hacen vida en el lugar. Su actividad favorita es oler las flores del santuario.
Es muy reconfortante saber que esta osa se encuentra ya fuera de peligro. Es una labor muy importante lo que hacen estas organizaciones por brindarles una vida digna a los animales maltratados.
Puedes ver el vídeo del rescate de la osa Kivtka, a continuación. ¡Es realmente conmovedor!
Si deseas realizar una donación para la organización, Four Paws, lo puedes hacer aquí.
¡Comparte la conmovedora historia de Kivtka con tus amigos!