Para muchos niños, encontrarse con un perrito solitario en las calles es lo mejor que les puede suceder; despierta en ellos la tentación de llevarlo a casa para brindarle un hogar y convertirse en su mejor amigo. Sin embargo, sabemos que estas iniciativas no siempre son bien recibidas por los padres.
Un pequeño de Caldas Novas, en Brasil, es un buen ejemplo de lo que ocurre cuando se tiene un gran corazón y un poco de sensatez. El niño, de unos 10 años, recogió a un cachorrito de las calles y lo llevó en su mochila hasta un establecimiento en el que sabía que el animalito podría comer y beber.
La cámara de seguridad del supermercado nos muestra el momento en el que el chico saca de su maletín a un perrito blanco de muy corta edad, y lo lleva hasta un exhibidor donde este establecimiento ofrece comida y agua para animales vagabundos.
Podemos ver claramente que el perrito está completamente hambriento, y que una vez percibe el olor de la comida, se dispone a alimentarse desesperadamente. Mientras, el niño retoma su camino a casa, despidiéndose con la mano de su amigo peludo.
En varias oportunidades el niño se despide con nostalgia del cachorrito al que ayudó, incluso lo podemos ver voltear en más de una ocasión mientras se aleja, para echarle una última mirada al perro.
What this child did when found an abandoned puppy will make you smile
In Caldas Novas, Brazil, a child found an abandoned puppy as he leaves school and tries to help by putting the dog in his bag, so he can leave it at the door of the pharmacy, where someone can help.Note that in front of the store there is a stand with water and food.
Publiée par Daily Pet sur Vendredi 5 octobre 2018
Muchas de las personas que han visto el video viral en Facebook no entienden cómo el niño no se llevó a casa el perrito. A cientos de usuarios le produce nostalgia la resignación del pequeño al renunciar a la idea de adoptar a esta mascota, pero otros justifican su decisión al hecho de que, posiblemente, sus padres no le permitirían quedarse con el cachorro.
Por fortuna para el perrito y para tranquilidad del niño, el establecimiento al cual llevó al animal para que bebiera y comiera, trabaja en alianza con una fundación que se encarga de proteger a animales vagabundos en las calles de Brasil.
Ese dispositivo en el que se ofrece agua y comida a los animales de la calle, hace parte de este programa. Cuando los encargados del supermercado notaron la presencia del cachorro, se comunicaron con la organización responsable y pronto fue llevado a un albergue, desde el cual se pretende encontrar un buen hogar para él.
Perú.com
Puede que el niño no llevara el perrito a casa para que formara parte de su familia, pero sin duda su decisión fue la más noble y acertada de todas, porque sacó a la mascota de las calles y la puso al alcance de la posibilidad de conseguir una buena familia.
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