Es bueno saber que existen ángeles en la tierra que defienden a los animales inocentes, que muchas veces pagan con su vida la crueldad a la que son sometidos por los humanos.
Esta mujer logró salvar la vida de un pequeño loris perezoso de Bengala, que estaba destinado a morir para convertirse en el ingrediente principal de uno de los platos servidos en un restaurante en Tailandia.
Ese día, esta mujer en compañía de su hermano salieron a cenar en un restaurante de la cuidad y de pronto se percató de algo muy extraño. Estaba ante sus ojos un pequeño animalito salvaje lleno de miedo.
Sus ojos expresaban lo aterrorizado que se sentía. Por su cuello pasaba una cadena que lo mantenía preso muy cerca de la cocina.
Afortunadamente, esta mujer se dio cuenta que el lugar donde se habían detenido para comer era muy conocido por preparar platos con animales salvajes arrancados de su hábitat. El único pecado de estos seres era vivir en el bosque.
Ella inmediatamente supo que debía hacer algo para salvar de la muerte al aterrado loris. Fue entonces cuando realizó la oferta de compra a los encargados del establecimiento de comida, la cual aceptaron.
Esta noble mujer sintió una conexión especial con el lindo animalito, y por un momento consideró en mantenerlo como mascota; sin embargo, atendiendo a las necesidades y el bienestar del animal no lo hizo. A parte que de hacerlo estaría incurriendo en una acción ilegal.
Las características físicas de estos seres realmente los hacen adorables. Sus pequeños rostros tienen una expresión de ternura maravillosa.
Lamentablemente, muchos animales de esta especie son arrebatados de la naturaleza para ser comercializados en el mercado ilegal de mascotas. También son usados por la cultura japonesa que mantiene la creencia sobre sus beneficios en la aplicación de la medicina tradicional.
En las redes se observa algunos videos “divertidos”, pero la realidad es que se expone a estos animales a torturas.
Cuando los loris perezosos son vendidos como mascotas, generalmente les arrancan los dientes para garantizar una absurda seguridad en su manipulación, esta especie no debe ser arrebatada de su hábitat. Muchos mueren en este cruel procedimiento.
La vida de estos animales también está amenazada por la pérdida de su hábitat y la caza para consumir su carne. La población de los loris perezosos de bengala salvaje ha disminuido en un treinta por ciento durante las últimas dos décadas.
Definitivamente, esta mujer decidió hacer lo correcto. Ella buscó una organización local de rescate de vida silvestre, Wildlife Friends Foundation Thailand (WFFT), y llevó al pequeño loris asustado, donde le colocaron el nombre de Kermit.
El personal del refugio se enfocó en brindarle seguridad a este tierno animalito, quien había vivido una traumática experiencia. Le quitaron con mucho cuidado la cadena que tenía sujeta a su pequeño cuello.
Kermit entró en un período de observación y luego inició un proceso de recuperación a cargo del personal de rescate hasta que esté capacitado para ser devuelto a la naturaleza.
Es necesario crear conciencia en la población sobre la situación tan alarmante que está viviendo esta especie. Comparte esta historia como una información sobre las amenazas de peligro que enfrentan estos encantadores animalitos.