Una mujer se ha convertido en un verdadero ángel para una gatita callejera, Blanche, de 95 años de edad, decidió darle una nueva oportunidad a una gata que apareció en su patio trasero.
La peludita estaba buscando comida, su condición era lamentable, no solo estaba muy sucia sino que parecía un pequeño bulto de piel y huesos. Con toda la intención de ayudar a la minina, la mujer comenzó a dejar comida y agua, también preguntó si le pertenecía algún vecino pero nadie la reclamó.
Mujer abre la puerta a una gatita y a los pocos días descubre una pequeña camada en su armario.
Una voluntaria adoptiva de Vets for Abandoned Pets, Ellen Richter comentó:
“La gata tenía una oreja muy mal, la mujer sabía que no estaba recibiendo ayuda. Ella fue extremadamente amable desde el principio”.
Los días pasaron y la gatita seguía visitando con frecuencia a su nueva amiga, mientras tanto, Blanche notó que la barriguita le crecía cada día más, rápidamente se dio cuenta que estaba embarazada.
Si bien la abuelita de 95 años intentó pedir ayuda para que asistieran a la gatita, todos los rescates locales estaban completos, nadie pudo ayudarla para ese momento.
La gata fue llamada Aberdeen.
Blanche no podía soportar la idea que lo gatitos nacieran en la calle, así que decidió actuar y tomar el asunto en sus propias manos. Llevó a la gata a su casa y le acomodó un pequeño espacio en el pudiera dar a luz. Ellen comentó al respecto:
“Trató de limpiarla con una toalla húmeda. Como una anciana discapacitada, Blanche tenía movilidad limitada, pero quería hacer lo mejor para la gata. Sabía que Aberdeen dependía de ella”.
A los pocos días, la mujer quedó bastante sorprendida cuando al entrar al vestidor encontró a Aberdeen con cuatro crías a su lado. Sin dudarlo, llamó a su hija para que fuera a ayudarla.
“Limpiaron a los gatitos, cambiaron las mantas y se aseguraron de que Aberdeen estuviera bien alimentada y recibiera muchos abrazos y besos”, dijo Ellen.
Afortunadamente, Blanche contó con el apoyo de su familia quienes se turnaban para cuidar a la nueva mamá y a sus bebés. Blanche no podía realizar mucha actividad física así que contar con el apoyo de sus seres queridos para que asistieran a los gatitos fue realmente reconfortante.
La familia cuidó de Aberdeen y sus crías hasta que personal de Vets for Abandoned Pets, tuvo los recursos y el espacio para recibirla.
“Recibí a mamá Aberdeen y a sus cuatro bebés. Tenía una oreja arrugada que la hacía única. Se suponía que era el resultado de una infección grave por ácaros en el oído”, destacó Ellen.
Gracias a todos los cuidados que recibió de Blanche como de su familia, Aberdeen y sus crías estaban completamente sanos. La nueva madre estaba contenta de ser una gata de interior, disfruta ronronear y parpadear lento.
Cuando terminó de destetar a sus gatitos, estaba lista para retirarse de la maternidad y pertenecer a un nuevo hogar para siempre.
“Es tan dulce y gentil. Es extremadamente cariñosa y se niega a dejar tu regazo”, dijo Ellen.
Esta hermosa bola de pelos ama ser el centro de atención y acurrucarse en el regazo de sus nuevos padres adoptivos. Después de todo, logró el final feliz que se merecía, ahora pasa sus días disfrutando de todas las comodidades de su hogar y el amor que su familia le ofrece.
“Estoy tan feliz por ella, no más vivir en la calle, ni tener más bebés. Mamá Aberdeen merece una vida maravillosa, para ser amada y apreciada por siempre”.
Aberdeen logró su final feliz gracias a que una mujer sintió empatía y misericordia por su situación. Son muchos los peluditos que están deseando que alguien transforme su vida, realiza un gesto de amor y se ese ángel en la vida de un animalito vulnerable.