Lamentablemente, algunas personas no conciben a los animales como un ser vivo que merece respeto y que tiene derechos, sino como un medio para obtener beneficios económicos a costa de su sufrimiento.
Nadie debería pagar por ver los «espectáculos» que ofrecen los circos y parques de atracciones donde los protagonistas son los animales. Detrás de esa actuación hay una historia de maltrato y dolor, donde ellos son retirados a la fuerza de su hábitat natural sometidos a un estilo de vida que no se parece en nada al adecuado para su desarrollo.
El protagonista de esta historia se llama Magnus, es un león bebé que apenas tenía días de nacido cuando lo separaron de su madre para convertirlo en la atracción principal de un circo español. A él, la vida no le sonrió, porque sufrió durante mucho tiempo las consecuencias del maltrato de seres despiadados que atentaron contra su vida.
El pobre tuvo que enfrentar crueles maltratos, solamente lo alimentaban con yogurt y pan para que se quedara pequeño el mayor tiempo posible y siguiera teniendo ese aspecto tierno. ¡Es desgarrador!
Los leones crecen a un ritmo increíblemente rápido, y a quienes tenían a Magnus jamás les importó su salud ni que se desarrollara con normalidad sino sus propios beneficios.
Por eso le impedían comer como un león, y la severa dieta le causó problemas en sus huesos, y en su desarrollo muscular.
Además, desarrolló estenosis del esófago, un estrechamiento que le impide deglutir la comida con normalidad.
Los dueños del circo, lo llevaron al veterinario para que le practicaran la eutanasia porque ya no les convenía tener un león enfermo y como era de esperarse no les interesaba su salud.
Afortunadamente, lo rescataron y llegó a las mejores manos, un equipo de veterinarios que sí estaba dispuesto a luchar para salvarle la vida.
Magnus necesitaba ser sometido a una cirugía en la que ampliarían su esófago, así que unieron todos sus esfuerzos para lograr que la operación fuera exitosa.
El león era muy valiente y tenía muchas ganas de vivir
Después de esta cirugía finalmente podría comer con normalidad
Fueron días difíciles para él, pero tenía muchas ganas de vivir y jamás se rindió
Valió la pena el esfuerzo ¡Todo había salido bien en el procedimiento quirúrgico!
Este animal merecía otra oportunidad de vivir como se merece
Poco a poco se recuperaría por completo, pero ya la prueba más difícil la había superado.
El equipo de médicos sonríe mientras ven cómo evoluciona favorablemente
A Magnus le esperaba un destino fatal, se habría apagado su vida sin haber conocido jamás el amor y sin disfrutar los días como un verdadero león en libertad.
Pero gracias a la valiosa labor de esos héroes él sí pudo tener un final tan feliz como se merece después de haber vivido experiencias tan traumáticas.
Es maravilloso verlo tan saludable y sobre todo tan feliz, admiramos la labor de quienes le devolvieron la vida a este precioso león.
¡Comparte este emotivo rescate con tus amigos! Esperamos que la historia de este rey de la selva sirva para crear consciencia sobre la participación de animales salvajes en los circos.