Sin duda que los animales son criaturas sorprendentes que no dejan de maravillarnos cada día con sus singularidades. Y uno de ellos dejó atónitos a los usuarios de las redes sociales cuando se apareció de repente al lado de una embarcación, lo que hizo quedó grabado en un video que se viralizó de inmediato.
Alec Dunn iba navegando en su pequeña y rápida lancha a motor en las aguas de un río no muy profundo de Bloomfield, al norte de Cairns, en Queensland, Australia. No era la primera vez que hacía ese recorrido y estaba acostumbrado a la fauna del lugar, pero nunca había visto un cocodrilo de cuatro metros y medio nadando como un delfín y eso fue justamente lo que presenció ese día.
El enorme reptil que es conocido como Tommy entre los pescadores locales, era sumamente rápido, se sumergía al agua y salía a flote de nuevo con tanta agilidad que el hombre llegó a pensar que rebasaría su bote en cualquier momento.
Alec no quiso pasar el hecho inadvertido y comenzó a grabar, y el video lo compartió en su cuenta de Instagram.
En realidad, parecía que el animal estaba muy a gusto al lado de la pequeña embarcación y daba a conocer sus dotes de nadador a la admirada tripulación. Sin duda alguna este magnífico animal no dio nunca muestras del menor indicio de timidez.
La publicación recibió los comentarios de Mick Pitman, un cazador de cocodrilos australiano, que expresó lo normal del comportamiento del animal. Por lo visto, es bastante común encontrar reptiles que se desplazan a velocidades similares a la del video, incluso llegan hasta a 187 kilómetros en el agua.
Sin embargo, otro experto ha planteado que se trata de un comportamiento poco usual y que debe tenerse mucho cuidado, porque pueden llegar a ser sumamente peligrosos para las embarcaciones pequeñas o personas que se encuentren cerca del animal. Eso puede significar que el reptil está enojado o listo para atacar.
“Es una inmersión furiosa, no una que veamos normalmente cuando se esconden”, dijo David White, quien es guía de cocodrilos.
Los usuarios de las redes sociales quedaron estupefactos con el video y no dejaban de comentarlo. En realidad, no les sorprendía tanto el tamaño del «cocodrilo-delfín», sino lo agilidad y rapidez con la que se movía y su parecido con el movimiento de los cetáceos en el agua.
“Siempre supe que podían moverse muy rápido, pero nunca lo vi. Esto es una locura”, escribió un internauta muy sorprendido.
Todos los animales con los que cohabitamos tienen ciertas características propias de su especie, pero definitivamente cada individuo tiene un don especial. Sería bueno ver en una competencia a este hábil nadador y a Michel Phelps.
Un motivo más para aprender a respetar y amar a los animales que tantas experiencias y momentos maravillosos nos regalan. Por eso no dejes de compartir esta maravillosa historia con todos tus amigos y conocidos.