Irremediablemente, la muerte es una de las realidades más duras que tarde o temprano debemos enfrentar, y que tristemente, no podemos evitar.
No hay nadie que en este mundo no haya sufrido esos devastadores momentos de dolor por la pérdida de un ser querido. Hemos derramado lágrimas recordando anécdotas, historias vividas juntos, recuerdos y momentos inolvidables.
Pero indudablemente, los seres humanos no somos los únicos que tenemos sentimientos; los animales también la padecen, y quien diga lo contrario, miente.
Y por si a alguien le queda la menor duda, lo que hizo Wiley, junto a la tumba de su abuela fallecida, realmente te dejará sin palabras.
Wiley es un hermoso perro-lobo de terapia que ayuda a los veteranos de guerra con el trastorno de estrés postraumático.
Este leal perrito adoptado trabaja junto a su dueño en un programa llamado Warriors and Wolves. Pero no fue hasta que visitaron la tumba de su abuela Gladys Einsensen, recientemente fallecida, cuando se dio cuenta de la magnitud del amor de Wiley y de cuánto estaba sufriendo su partida.
Los perros sólo saben de amor y fidelidad, y sus sentimientos son tan profundos e insospechados, que incluso después de que un humano muere, ellos no entienden por qué no pueden estar más a su lado. Harían lo que fuera por volver a abrazarlos y los humanos que presenciamos esas escenas, no podemos menos que rompernos por completo.
Wiley comienza a llorar de la forma más desconsolada que hayan visto antes sus dueños
Los perros saben perfectamente cuando sus humanos favoritos ya no están más y lloran por ellos con tanto sentimiento, como si lo hicieran los humanos.
En el vídeo compartido por su familia claramente se puede ver cuánto sufre el perrito, gimiendo sobre la tumba de la abuela. Se echa con su hocico tembloroso, en una especie de hipido contenido, como cuando hemos llorado demasiado y ya no podemos más.
Inmediatamente, sus dueños tratan de brindarle todo el cariño que necesita, acariciando su cabecita y su lomo, pero nada parece funcionar.
«Nosotros también la echamos de menos», es lo único que alcanzan a decirle, en un afán de empatizar con su dolor.
El video no tardó en hacerse viral con casi 10 millones de visitas en YouTube. ¡Intenta no llorar!:
Los comentarios en las redes no se hicieron esperar: «Oh Dios mío. Esto es tan triste. Desearía que pudieran hablar, pero sus acciones lo dicen todo. Precioso cachorro», «Los perros son más cariñosos y más leales que la mayoría de las personas».
Ante lo que su familia se vio obligada a dar explicaciones al pie del video y escribieron:
«No soy veterinario y no puedo decir si estornuda al revés, lo que sí sé es que nunca lo había hecho antes y no lo ha hecho desde entonces. Quizás humanizo sus acciones, pero es la forma en que elijo lidiar con la pérdida».
«Además, para aquellos que afirman que se está muriendo, les prometo que no. Tenemos un veterinario en el santuario y Wiley está bien», agregó.
Lo que sí nos queda claro es que Wiley tiene sentimientos, y sufre la partida de quien más ama, como lo haría cualquier otra mascota fiel. ¡No los merecemos!
Esperamos que estos pocos segundos te hayan impactado tanto como a nosotros. Si crees que los perros tienen sentimientos como las personas, recuerda compartir este vídeo con tus amigos.