¿Te has preguntado alguna vez qué ocurre con todos esos animalitos que no logran simpatizar con ciertas personas y deben permanecer en un refugio? Hay albergues de animales que pueden mantener a las mascotas con ellos por muchos, muchos años…
Hay otros que tienen un programa de eutanasia para esos perros o gatos que se quedan atrás y un establecimiento en la costa de Texas tiene exactamente esa política.
Cuando Daisy llegó a Vet Ranch estaba triste y no podía apoyar una de sus patas
No imaginas cuántos animalitos se ven forzados a pasar el arcoiris, aunque aún estén sanos, llenos de vida o sean sencillamente diferentes.
Daisy era una de estas perritas que no lo contaría. Ella llegó al refugio de Texas acompañada de todos sus cachorritos.
Cuando le hicieron la evaluación médica se dieron cuenta de que tenía un problema en la cadera y fue diagnosticada con gusano del corazón.
Esperaron a que Daisy cuidara con abnegación a sus perritos. Una vez que las crías estaban listas para ser ubicadas en hogares, una vez que cada uno de sus cachorros encontró su lugar en el mundo, esperaron un poco para ver si la madre corría la misma suerte, pero no ocurrió. A Daisy nadie la quiso.
En este video puedes ver todo lo que fue necesario para ayudar a Daisy a recuperar su salud
Entonces era inevitable: la perrita debía ser enviada a otro mundo. Por suerte para ella, el equipo de Vet Ranch supo cuál era su cruel destino y se propuso hacer todo lo que estuviera a su alcance para tenderle la mano a este animalito.
Fueron por Daisy y la salvaron de una muerte segura en el último minuto. Se dieron cuenta de que había muy buenas opciones para sanar su problema en la cadera y con eso, su cojera. Para ello era necesaria una cirugía y no tardaron en llevarla a cabo.
Luego llegó el momento de la recuperación. Para eso, Daisy fue acompañada del equipo de Vet Ranch con mucho cariño y paciencia. La rehabilitación salió de maravilla y se descubrió lo que todos habían estado suponiendo: el deseo de recuperación de la perrita estaba por encima de las adversidades.
Daisy estaba decidida a tener una vida normal, como cualquier otra mascota, pero muy especialmente a conservar su vida, así que demostró que estaba llena de deseos para luchar y que podía superar todos los obstáculos.
Con amor y perseverancia, la perrita recuperó el brillo en su mirada y la alegría
Con amor, paciencia y dedicación, Daisy logró lo que muchos otros animales como ella, llenos de cariño y ganas de vivir, logran: ¡recuperarse! La perrita volvió a caminar con normalidad y no solo eso… ¡está llena de vida y de felicidad!
¡Las personas de Vet Ranch fueron amables y amorosas! Pensaron que Daisy merecía una segunda oportunidad en la vida y ella nunca se dio por vencida. ¡Gracias a eso finalmente fue adoptada y se fue a su hogar para siempre con una familia amorosa en Utah! Asombroso.
¡Ahora es una mascota sana y feliz!
Este historia de amor y de superación, son de esas anécdotas que nos encantan y que merecen ser compartidas con otros, ¿no lo crees?